
La antigua Gas de France ha perdido más valor en bolsa este año que ninguna otra de las grandes compañías eléctricas del mundo, pero por eso mismo entrar ahora ofrece un descuento del 50% en los beneficios incluídos en el precio de la acción frente al sector de la energía. | Todo sobre el fondo asesorado por elEconomista, Tressis Cartera Eco30.
La Pekín-París fue un desafío más que una carrera. Un recorrido de 16.000 kilómetros que atravesó en 1907 el desierto del Gobi y la estepa siberiana y en la que cinco aventureros arrastraron aquellos primeros coches motorizados por la geografía euroasiática.
Todo aquello fue organizado por un periódico francés, Le Matin, y lo ganó un príncipe, Scipione Borghese; pero lo importante es que unió China con Francia cuando casi nadie se imaginaba que China se convertiría en un centro del poder mundial.
Engie, valor que forma parte del fondo asesorado por elEconomista, Tressis Cartera Eco30, supo ver la ambición de Pekín para la transformación energética del país, que desde la compañía gala ven como el mayor mercado de energías renovables.
En 2010, la entonces conocida como Gaz de France Suez envió el primer barco cargado de gas natural licuado a Shanghái; en 2011, se asoció con el fondo soberano chino CIC y le otorgó una participación del 30% en la exploración y producción de recursos.
En 2015, Manuel Valls visitó China y reforzó la presencia de Engie en el mercado de gas natural, y en 2017 la consejera delegada Isabelle Kocher anunció una inversión de 1.000 millones de euros en el país.

Aunque los ingresos procedentes de Asia-Pacífico supusieron el 4,9% del total en 2019, invertir en Engie es hacerlo también en China.
Sin embargo, está siendo un año difícil para la firma francesa en el parqué. Ha perdido casi 11.000 millones de euros en valor bursátil desde enero, siendo la empresa del sector que más ha reducido su tamaño entre aquellas con una capitalización superior a los 20.000 millones.
A pesar de ello, recibe todavía una recomendación de comprar del consenso de analistas que recoge Fact-Set, si bien se ha deteriorado desde que empezó el ejercicio, y se prevé que su beneficio operativo (ebitda) crezca un 15% entre 2019 y 2022, y gane 10.000 millones en 2021; aunque todavía quedaría por debajo de los 11.600 millones de 2013.
Así las cosas, el inversor que decida poner sus ahorros en Engie pagará cinco euros por cada euro de beneficio, ya que el multiplicador de beneficios que incluye la deuda (ev/ebitda) se estima en las 5,2 veces en 2021, lo que supone un descuento del 52% frente a la media de 10,8 veces del sector, del que también forman parte Enel, Iberdrola, China Yangtze Power o NextEra.
"El precio actual de la acción de Engie no representa la calidad de sus activos, poder de generación de efectivo y previsiones de beneficio por acción a largo plazo", subrayan desde Barclays.
A principios de mes, China anunció el descubrimiento de una reserva enorme de gas natural
Sin embargo, para que el inversor o la inversora vuelvan, creen que es necesario actualizar las previsiones de la compañía para el periodo 2020-2022; algo en lo que coinciden en JP Morgan Cazenove: "Claramente, esto no respalda la confianza en la empresa".
A principios de mes, China anunció el descubrimiento de una reserva enorme de gas natural con un billón de metros cúbicos en Sichuan. ¿Contará Pekín con Engie para explotar los yacimientos? ¿Dejará de importar gas occidental en un nuevo periodo de autosuficiencia?
El fondo 'Tressis Cartera Eco30' pierde un 28% en los cinco primeros meses del año, con datos hasta el 20 de mayo, después de ganar un 20,3% en 2019. Los valores que más rendimiento han aportado son Marvell, que se revaloriza un 12,4%, y Lennar, que gana un 8,5%, mientras que la que más resta es Royal Caribbean, un 67%.