El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI), el crudo de referencia en EEUU, se desplomó este lunes un 24,56% y cerró en 12,78 dólares por barril. Los problemas de sobreoferta siguen abrumando a este mercado que está viviendo una volatilidad histórica. El Brent, de referencia en Europa, cayó un 6,76% hasta los 19.99 dólares el barril para entrega en junio.
La semana pasada, el precio del Texas sufrió una fuerte volatilidad, e incluso, llegó a cotizar en negativo por primera vez en su historia por la falta de espacio de almacenamiento y la baja demanda a raíz de la pandemia del coronavirus. Ahora mismo, la CocaCola vale diez veces más que el petróleo, lo que deja entrever la gravedad de la situación para los productores.
Las tensiones generadas entre EEUU, e Irán, animaron la cotización del crudo en las últimas jornadas. Un conflicto bélico en la zona podría paralizar la producción de millones de barriles y algunas de las zonas más usadas para el comercio del petróleo.
Vuelven las caídas con fuerza
Sin embargo, esta jornada vuelven las bajadas al mercado de petróleo. Cabe recordar que la semana pasada el petróleo de EEUU llegó a cotizar en terreno negativo, al menos así lo hizo el futuro para la entrega en mayo.
Los precios del petróleo siguen, de este modo, a la baja pese a que la OPEP+ (la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados) se comprometieron a reducir la producción en 9,7 millones de barriles al día. El desplome de la demanda global está engullendo esos recortes de forma sobrada.
Sin ir más lejos, los inventarios de petróleo en EEUU sumaron 15 millones de barriles durante la semana pasada, ascendiendo a un total de 518 millones, un 9% por encima de la media móvil de los últimos cinco años. El dato quedó levemente por debajo del anterior, que superó los 19 millones de barriles en una semana.
