Bolsa, mercados y cotizaciones

El bono griego descuenta apoyo del BCE y ya renta menos que el de Italia

  • Se espera que la entidad permita a la banca griega comprar más títulos soberanos
  • El bono griego ya está en el 1,29%, frente al 1,33% del italiano
El Partenón. Foto: Archivo
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Año 2015. La Coalición de Izquierda Radical, Syriza, ganaba las elecciones en enero y tensionaba a los mercados con su discurso contrario a las políticas de austeridad. "Para Grecia, la troika es algo del pasado", decía entonces Alexis Tsipras, quien pretendía renegociar la deuda del país, que había arrancado el año en el entorno del 10% de rentabilidad. El desenlace de las tensiones no fue ese, sino que acabó en la petición de un nuevo programa de ayuda y con Tsipras asumiendo que el Banco Central Europeo (BCE), parte de esa troika a la que se refería el ex primer ministro, dejaba a la deuda griega fuera de su programa de estímulos (PSPP), por no tener grado de inversión.

También, el BCE, supervisor bancario de la zona euro, decidió poner límites a la deuda soberana griega que los bancos helenos podrían tener en su balance "por razones de prudencia", destacaba entonces el regulador. No era segura, a sus ojos, y no querían más riesgos en el sistema financiero griego. Ese año, el bono del país llegó a superar una rentabilidad del 19%. Este miércoles, cuatro años después, con Tsipras y su partido ya fuera del gobierno heleno desde verano de este año, el título a 10 años cayó por debajo del italiano en rentabilidad, algo que no había vuelto a ocurrir desde antes del estallido de la crisis financiera global, en el año 2008. El bono griego lideró las compras en el Viejo Continente, con una caída de 5,6 puntos básicos de rentabilidad, hasta el 1,29%, cuatro puntos básicos por debajo del título italiano, que se movía en el entorno del 1,33% al cierre de la bolsa europea.

El detonante de la última reacción del bono griego tiene que ver con el BCE. Según publicó Bloomberg citando fuentes que no quisieron identificarse, el organismo ha decidido levantar el límite establecido de compras de bonos griegos a los bancos del país, una decisión que parece se formalizará el próximo mes de febrero. Según las fuentes de la agencia, la nueva presidenta del BCE desde noviembre, Christine Lagarde, se habría reunido el pasado martes con el primer ministro, el conservador Kyriakos Mitsotakis para debatir sobre la cuestión.

Unas finanzas más robustas

La mejora económica que ha experimentado Grecia durante los últimos años es la que ha propiciado que la rentabilidad del bono griego ya sea menor que la del italiano, según explican los expertos. Enrique Lluva, subdirector de renta fija en Imantia Capital, considera clave que "las finanzas públicas griegas están muy bien en este momento. Aunque tienen una deuda sobre el PIB todavía muy elevado, por encima del 170%, ahora tiene superávit primario. Con el nuevo gobierno te puede estar bajando 4 ó 5 puntos de deuda sobre el PIB al año, y en un lustro se puede poner por debajo de Italia en endeudamiento", explica.

"Cuando analizas los dos países a nivel macroeconómico, a día de hoy es más sostenible Grecia que Italia. Mientras Italia sigue generando déficit público y no crece nada, Grecia crece algo y tiene superávit primario, por las exigencias de la UE tras el rescate", destaca Lluva. "El nivel de deuda pública alcanzó su punto máximo en 2016, con un 181% del PIB y desde entonces ha disminuido", explicaban en noviembre desde Crédito y Caución, quienes consideran que "mantendrá en 2019 y 2020 el repunte de su crecimiento económico, impulsado principalmente por el consumo interno, en un contexto de recuperación de la confianza de las empresas y de los consumidores, reducción de la incertidumbre institucional y la reanudación de los préstamos financieros".

Mientras tanto, las perspectivas para Italia no parecen demasiado esperanzadoras: "Es un país que no termina de resolver sus cuestiones pendientes, ni sale del circulo vicioso, por ejemplo, de reflotar algunas empresas porque hay un importante asentamiento de votos en según qué región", explica Lluva.

Además, el experto de Imantia Capital destaca cómo en el pasado reciente Grecia ha podido beneficiarse de mejores condiciones de financiación: "Salvo Alemania, Grecia ha sido el país que se ha financiado más barato en la zona euro. Se le pusieron tipos prácticamente al 0%. Ha llegado a emitir bonos perpetuos sin cupón. Ha tenido unas condiciones de financiación extremadamente laxas, que le permiten, en las pocas emisiones que hace en mercado libre, financiarse ya en el 0%, o incluso en negativo", destaca. Tampoco hay que olvidar la cuestión de la oferta: "No hay mucha deuda griega en mercado, mientras que italiana hay un montón", explica Lluva.

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