
Las aseguradoras de todo el planeta tienen cada vez más difícil construir una buena cartera de inversión. Los tipos bajos no son precisamente una ayuda, como afirmó la semana pasada el vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos. Pero no son el único escollo. De hecho, el principal reto es generar valor cumpliendo con la regulación, tal y como revela la última encuesta mundial de la gestora de fondos Natixis IM cuyos resultados se han dado a conocer este lunes.
"La regulación está teniendo un impacto en todo el espectro de la actividad de las aseguradoras", refleja la firma de origen francés en su último informe. Sus conclusiones son resultado de una encuesta hecha el pasado julio a 200 jefes de inversión (CIOs, por sus siglas en inglés) y miembros de equipos de inversión de compañías de vida, propiedad y accidentes y reaseguros de Europa, Asia y Norteamérica.
Estos profesionales han trasladado los problemas que afrontan actualmente para lograr valor en sus carteras ante el vacío que ha dejado la baja rentabilidad de la deuda en los diez últimos años. Por ello, según la última Insurance Survey de Natixis IM, las aseguradoras de todo el mundo están dispuestas a arriesgar más con la liquidez con tal de conseguir mejores rendimientos. Así, el 75% de los encuestados piensa que es esencial tener activos alternativos y más de la mitad (el 53%) asegura que cada vez los utilizan más para sustituir la renta fija.
Pero no es sencillo. Este estudio revela que la regulación es el principal problema. En concreto, según los profesionales encuestados, los mayores obstáculos desde el punto de vista operativo son los costes de implementación y los desafíos técnicos. Por su parte, los CIOs encuestados destacan los mayores requisitos de capital y la aplicación de cambios en la gestión de riesgos para cumplir con las evaluaciones de solvencia.
De esta manera, dos tercios de las aseguradoras ven como un auténtico desafío generar valor y, al mismo tiempo, cumplir con los requisitos regulatorios. Las compañías de seguros de Estados Unidos son las más frustradas (tres de cada cuatro muestran su malestar). Y las francesas y alemanas no se quedan lejos: el 70% y el 67% de ellas, respectivamente, también se quejan de lo mismo.
A nivel global, la gran mayoría de las aseguradoras afirma que los requisitos de la regulación sobre el capital provocan que sus carteras de inversión se orienten hacia activos de renta fija de bajo rendimiento. Es más, el 89% señala que les impiden de facto invertir en activos de mayor riesgo.
Problemas internos
Pese a todo, casi todas las compañías encuestadas (el 93%) dicen que están bien preparadas para el entorno regulatorio cambiante. "Sin embargo, estar preparado desde un punto de vista administrativo y de cumplimiento no significa necesariamente que estén bien posicionadas para tener éxito en la inversión", defiende Natixis IM en su informe.
Y es que la regulación no es el único quebradero de cabeza para las aseguradoras al buscar rentabilidad. Sus profesionales también apuntan a la complejidad que implica el entender estrategias alternativas e implementarlas debidamente en una cartera. En este sentido, casi un tercio de las empresas consultadas dicen que no tienen la experiencia interna necesaria para hacerlo.
Asimismo, las propias compañías de seguros se autoimponen restricciones. Unos límites internos que, como explica la gestora de fondos, pueden evitar que los profesionales adopten estrategias de inversión que se consideran más arriesgadas.
Eso sí, los escollos, aunque son parecidos, se ven de diferente forma en cada región. En Alemania, Francia y Asia-Pacífico preocupa especialmente la mencionada complejidad. En cambios, las aseguradoras de Reino Unido e Irlanda ven con peores ojos sus restricciones internas de inversión.
Así, lo que necesitan las aseguradoras a nivel global "son soluciones alternativas que puedan existir dentro de las limitaciones de los diversos regímenes reguladores en todo el mundo y que se puedan implementar con o sin experiencia interna", concluye Natixis.
De hecho, la externalización de la gestión de las carteras empieza a coger peso. De media, las aseguradoras externalizan casi la mitad de sus carteras (el 48%). En concreto, siete de cada diez encuestados externaliza parte de su cartera. E incluso el 10% delega la gestión de toda su cartera a una empresa externa.