
Es el mayor productor de petróleo al norte del paralelo 49 y se prevé que consiga este año el mejor beneficio de su historia. Limitado por la falta de oleoductos para exportar sus arenas bituminosas, es una inversión más atractiva que ExxonMobil y Chevron. | Todo sobre el fondo asesorado por elEconomista, Tressis Cartera Eco30.
Pintarse la piel de negro con el fin de parecer africano es una práctica extendida en fiestas populares en España, pero en Canadá podría costarle la reelección al primer ministro, Justin Trudeau, que se enfrenta al veredicto de las urnas el 21 de octubre.
Esta semana se publicaron unas viejas fotos de Trudeau caracterizado de Aladdín con la cara más negra que el betún, y el fantasma del blackface ha reaparecido en un país que ha padecido la discriminación racial. Durante décadas, fueron muchos los programas de televisión en los que actores de piel blanca tintaban sus rostros en comedias que desprestigiaban a los negros y los retrataban como bobos y perezosos.
Y en el contexto de unas elecciones muy reñidas, en las que los conservadores de Andrew Scheer le pisan los talones a los liberales de Trudeau, el golpe ha hecho daño. No obstante, quienquiera que ocupe el Gobierno del país en los próximos años tendrá que lidiar con la queja de las petroleras por la falta de oleoductos para dar salida al volumen de arenas bituminosas que genera el país en provincias como Alberta y que afectan de lleno a Suncor, el mayor productor de petróleo y carburantes de Canadá y valor destacado del fondo asesorado por elEconomista, Tressis Cartera Eco30.

La compañía energética obtendrá el mayor beneficio neto de su historia en 2019: ganará 5.075 millones de euros, la cifra que arroja el consenso de mercado que recoge FactSet. Es un 54% más que lo declarado el año pasado y se prevé que este beneficio récord permanezca en la zona de los 4.800 millones hasta 2021.
Pero no es ese el único elemento por el que merece la pena invertir en Suncor: el multiplicador de beneficios que incluye la deuda (ev/ebitda) está por debajo del de la media del sector mundial del petróleo (entre las firmas con una capitalización bursátil superior a los 20.000 millones de euros). Esto quiere decir que el inversor que elija Suncor tardaría 5,9 años en recuperar la inversión por la vía del beneficio, frente a la media de 7,6 veces de la industria -y las 12,3 veces de Enbridge y las 8,4 veces de ExxonMobil-.
"Suncor está mejor posicionado que sus rivales, con casi el 90% de su producción vendida en Brent o West Texas", subrayan desde Bloomberg
Además, aunque se trata de un sector poco endeudado, conviene fijarse en que la ratio de Suncor es de 1 vez frente al promedio de 1,9 veces de sus competidores.
"Gracias al aumento de la producción en los proyectos de Hebron y Fort Hills, la producción total de petróleo podría alcanzar los 800.000 barriles diarios de media en 2019, con un gasto en su mayor parte plano, a medida que los precios del crudo canadiense mejoran temporalmente", explican los analistas Fernando Valle y Michael Kay, de Bloomberg Intelligence.
Los expertos esperan que Suncor genere un exceso de flujo libre de caja y recalcan que está "mejor posicionado" que sus rivales, con casi el 90% de su producción vendida en Brent o West Texas, en lugar del barril local Western Canadian Select. Mientras tanto, la construcción de la TransMountain, el oleoducto de 1.000 kilómetros desde Alberta hacia el Pacífico, sigue su curso, pero preocupan las consecuencias en el medio ambiente y en las comunidades de primera naciones o nativos americanos por las que pasará.