
Parecía una mañana apacible para el petróleo. El Banco Popular de China anunciaba un nuevo recorte de los tipos de interés para estimular su economía, tras este movimiento (China es el segundo mayor consumidor de crudo) el petróleo tocó máximos del día en los 45,75 dólares el barril West Texas, de referencia en EEUU. Sin embargo, la tendencia bajista es muy fuerte, como consecuencia de la sobre-oferta mundial, lo que según Reuters ha vuelto a enviar al crudo a los 44,5 dólares.
Desde el cierre del viernes pasado en 47,77 dólares, el oro negro acumula una caída de casi un 7%. El Brent, referencia en Europa, cae algo menos aunque sigue cotizando por debajo de los 48 dólares el barril, cuando hace poco más de una semana estaba lidiando por alcanzar los 53 dólares.
Hans van Cleef, economista jefe en ABN Amro en Amsterdam, explica que "el recorte de tipos en China apoya las expectativas de demanda de crudo para el futuro y ligeramente las expectativas a corto plazo... Sin embargo, como hemos podido ver, tan pronto como los inversores vuelven a la realidad de un mercado con sobre-oferta, el sentimiento alcista inicial se esfuma".
La reunión de la OPEP y EEUU
La OPEP y los países invitados a la reunión del pasado martes decidieron no implementar ninguna medida o nueva estrategia sobre la producción de petróleo. El objetivo del Gobierno de Maduro era lograr el compromiso de los países del cártel para reducir la producción de crudo mundial para que el precio del oro negro se eleve y hacer frente así a los grandes desequilibrios fiscales que afronta el país. Sin embargo, parece que las pretensiones del país sudamericano cayeron en saco roto.
Además, esta misma semana se conoció el incremento en ocho millones de barriles las reservas de crudo en EEUU (Ya acumula 476 millones de barriles en reservas). Otro dato más que muestra la sobre-oferta del mercado, se consume menos de lo que se produce, por ese motivo crecen las reservas, que suelen ser la diferencia entre los barriles bombeados y los 'quemados' o consumidos.
Jonathan Barrat, jefe de inversión en Ayers Alliance, también ha señalado esta mañana que el movimiento de China "sugiere una mayor actividad económica para el futuro, lo que forzará un incremento del consumo de crudo en el país", lo que no está evitando que el petróleo vuelva a acabar una semana más en terreno negativo.