
El Consejo General del Notariado registra un alza de operaciones de hipotecas inversas en los últimos años entre mayores de 65 años, aunque apuntan que aún son operaciones muy residuales. Concretamente, según los datos del Centro de Información de Estadística del Notariado, en 2023 se autorizaron 409 hipotecas inversas, frente a las 31 de todo el ejercicio 2017, lo que representa un incremento del 1200%.
El crecimiento de este producto es constante, aunque se ha incrementado en los últimos años. En 2018, los notarios registraron 45 actos; en 2019, 149; en 2020, 111; en 2021, 197, para escalar en 2022 y 2023 a 549 y 409 actos, respectivamente. En el primer semestre de año se han situado en las 143.
Estas hipotecas inversas consisten en que clientes mayores de 65 años con vivienda en propiedad y ya pagada, hipotequen un porcentaje de la misma para recibir liquidez con la que poder mantenerse económicamente el resto de su vida.
Por otro lado, los notarios apuntan que el grueso de las operaciones que realizan los mayores de 65 años son testamentos y poderes generales y preventivos. Concretamente, son el 98% de los actos de protección patrimonial realizados en el primer semestre de 2024.
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