
La tecnología europea ha arrancado el año dejándose 5 puntos de rentabilidad frente al Stoxx 600, pero la fotografía a largo plazo proyecta una imagen muy diferente, con el sector batiendo sistemáticamente la rentabilidad de la bolsa del Viejo Continente en la última década.
Y aunque los inversores hayan optado en las últimas semanas por volver al ciclo y castigar a la tecnología, los analistas de Citi mantienen un sesgo constructivo sobre esta industria, apoyado en los atractivos fundamentales y los vientos de cola cíclicos para superar un contexto de valoración poco favorable.
"Los múltiples factores apuntan a un crecimiento superior al 20% del beneficio por acción (BPA) para el sector en 2022, en comparación con el 5% previsto para el mercado de la UE en general. La tecnología también debería seguir beneficiándose del cambio estructural hacia las estrategias ESG (aquellos que invierten en base a criterios ambientales, sociales y de gobierno corporativo). Por otro lado, el aumento de los tipos supone un viento en contra y lo tenemos en cuenta en nuestro marco de valoración", afirman desde la entidad.
Citi: "Dentro de Europa, el sector de la tecnología tiene las mejores puntuaciones en materia de ESG"
Sus expertos destacan que los fondos sostenibles han atraído constantemente entradas, independientemente de lo que haga el mercado. Durante el periodo comprendido entre enero y diciembre de 2021, los fondos ESG europeos registraron entradas de 28.000 millones de dólares, mientras que los productos no sostenibles sufrieron reembolsos de 22.000 millones de dólares. "Dentro de Europa, el sector de la tecnología tiene las mejores puntuaciones en materia de ESG", apostillan estos analistas.
Recursos básicos y energía son los sectores europeos con más riesgo, aunque no son elevados
De los principales índices sectoriales europeos que recoge Bloomberg, los miembros del Stxe 600 Technology EUR ofrecen la mejor puntuación para Sustainalytics. Este proveedor considera que las tecnológicas europeas presentan, de media, un nivel de riesgos ESG de 16 sobre 100, es decir, un nivel bajo de riesgos de sostenibilidad no gestionados (una puntuación entre 0 y 10 indica que esos riesgos son inapreciables y por encima de 30 se consideran elevados). Por poner esta calificación en contexto, las tecnológicas que aglutina el Nasdaq 100 ofrecen, de media, un 20,5 sobre 100.
En su informe Sostenibilidad. El tsunami regulatorio que viene, la consultora EY recordaba recientemente que si bien hay un cierto consenso en que Europa perdió la batalla de la digitalización frente a EEUU y China (en 2020 sólo 2 de las 20 mayores tecnológicas del mundo eran europeas, SAP y Accenture) sí existe la percepción de que Europa podría liderar la transformación hacia un modelo económico sostenible basado en la lucha contra el cambio climático.
"La UE podría estar a la cabeza de este cambio por dos motivos: porque la sostenibilidad se va a convertir en su motor de crecimiento y porque ésta se planea como una política transversal, con impacto en todas las demás, y no como una iniciativa aislada", apunta la publicación.
Las firmas con riesgo "inapreciable"
La alemana SAP y la francesa Capgemini son, con un 9,7 y un 10,1, respectivamente, las tecnológicas europeas que brindan un nivel inapreciable de riesgos de sostenibilidad y sendas recomendaciones de compra avaladas por el consenso de FactSet.
La primera es la mayor firma de software de Europa y la tercera a nivel global. Además de la calificación de Sustainalytics, SAP también cuenta con un rating de triple A en sostenibilidad para MSCI (el más alto) y una A- para CDP (Carbon Disclosure Project, que evalúa el compromiso en la lucha contra el cambio climático). En su informe anual correspondiente a 2020, la propia compañía citaba como ejemplo de riesgos a las restricciones en la cadena de suministro por motivos de seguridad entre EEUU y China, las tensiones entre entre la primera potencia económica y Corea del Norte así como la presión de las sanciones occidentales. Con un valor en bolsa de 151.000 millones de euros y un retroceso en el parqué del 3% en 2022, el consenso le otorga un potencial alcista del 18% de cara a los próximos 12 meses.
SAP también recibe un rating de 'Triple A' en sostenibilidad de MSCI, el más alto
En cuanto a Capgemini, fue uno de los primeros actores de la industria en fijar, en 2016, objetivos de reducción de las emisiones de carbono (que se alcanzaron en enero de 2020, diez años antes de lo previsto y antes de los cierres por Covid-19). Por otro lado, la consultora de servicios tecnológicos también ha priorizado la diversidad y la inclusión desde hace varios años, aumentando la proporción de mujeres entre los empleados, de 29.5% en 2015 a 33.7% a cierre de 2020. La firma, que despidió 2021 en máximos históricos, cede un 6% en enero pero cuenta con margen para anotarse un 17% en el presente ejercicio.
Les siguen con un 11,1 y un 11,2, respectivamente, la noruega Schibsted y la suiza Temenos. Lo que comenzó como una pequeña empresa editorial en 1839 es ahora una familia nórdica de marcas digitales. Schibsted, con un tamaño en bolsa menor que las anteriores, cuenta con el mayor potencial entre sus comparables, cerca de un 52% tras haber comenzado enero con un retroceso del 16% en el parqué. En cuanto a Temenos, que además de en Suiza también cotiza en el Dax, está especializada en software empresarial para bancos y servicios financieros. Sus títulos pierden un 12% en el año, lo que abre un potencial cercano al 24%.
¿Cómo puntúan el resto de sectores europeos? Con una calificación media de 17 sobre 100 le siguen la industria de telecomunicaciones y el de servicios financieros sin incluir a la banca que ofrecen un 21 sobre 100. Al otro lado, los recursos básicos y energía presentan las puntuaciones de riesgo más elevado, 25 sobre 100, de media aunque todas por debajo del umbral de riesgo elevado.