
En los últimos tiempos, las empresas europeas no han tenido más remedio que esforzarse por ser transparentes en lo que respecta a las cuestiones ambientales, sociales y de buen gobierno corporativo (ESG). Consulte más noticias sobre sostenibilidad en elEconomista Inversión sostenible y ESG.
Han aprendido a desglosar datos más allá de los puramente financieros, e informar, además de sobre su ebitda o su beneficio neto, sobre aspectos como la brecha salarial entre hombres y mujeres, o las emisiones de gases de efecto invernadero. El pasado mes de abril, la Comisión Europea anunciaba que establecería normas comunes para que las empresas reporten sus datos de sostenibilidad de forma comparable y homogénea, y extendía la obligación de hacerlo a más compañías.
España ha sido, desde el punto de vista regulatorio, más restrictiva y más exigente que sus vecinos europeos en este sentido, con el impulso, además, de la reforma, en junio del año pasado, del Código de Buen Gobierno. La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) revisaba este conjunto de normas y otorgaba una mayor relevancia a la información no financiera y la sostenibilidad, además de poner el foco en cuestiones como la igualdad (aún inexistente en la gran mayoría de cotizadas) o las remuneraciones a los consejeros.
Más transparente que sus vecinos
De hecho, el Ibex 35 luce, a día de hoy, más transparente que índices de referencia como el Dax o el Cac. De acuerdo con la puntuación que otorga Bloomberg a la divulgación de datos de sostenibilidad de sus compañías, con datos de cierre de 2020 los componentes del selectivo español obtienen, de media, 56,4 puntos sobre un total de 100, por encima de los 49,4 puntos que reciben las compañías del índice alemán, o los 52,6 del francés.
En esa nota media española no se ha tenido en cuenta a tres compañías -Iberdrola, IAG y PharmaMar- por no recoger Bloomberg todavía datos correspondientes al cierre de 2020 (algo que también ocurre con algunos valores, pocos, de los otros dos índices). Dentro del Ibex, las que salen mejor puntuadas son Endesa (con 68,7 puntos sobre 100), Acciona (con 67,8) y Naturgy (con 66,5) aunque, si se tuviese en cuenta el dato de cierre de 2019 de Iberdrola, la eléctrica presidida por Ignacio Sánchez Galán -que precisamente en los últimos tiempos ha visto comprometida su gobernanza por el caso Villarejo- se situaría en cabeza.
También obtienen calificaciones superiores a 60 puntos Fluidra, Siemens Gamesa, Ferrovial, BBVA, Aena, Enagás, Inmobiliaria Colonial, Meliá, Grifols y Mapfre (la nota más baja de este grupo, la de Mapfre, es de 60,1 puntos).
Sabadell y Solaria salen peor en la foto de la transparencia, con puntuaciones inferiores a 40 puntos sobre 100
En la otra cara de la moneda se sitúan las cotizadas que menos información desglosan sobre aspectos extrafinancieros: Sabadell (con solo 34,6 puntos), Solaria (con 34,7), Pharma Mar (40,1 es su dato de cierre de 2019, el último que ofrece Bloomberg), Almirall y el conglomerado aéreo IAG (ambas con 47,5).
Este rating de Bloomberg, que mide la cantidad de datos ESG que declaran públicamente las compañías, otorga un 0 a aquellas empresas que no divulgan ninguna métrica de sostenibilidad y un 100 a las que declaran todos los datos recopilados por esta agencia. No pondera por igual todas las cuestiones ambientales, sociales y de buen gobierno, sino que dentro de cada uno de los tres pilares unas pesan más que otras (como ocurre, por ejemplo, con las emisiones de gases de efecto invernadero).
Mejoras en Aena o Fluidra
Más allá de ese listado de mejores y peores dentro del índice de referencia, llama la atención la mejora que han experimentado algunos valores españoles si nos fijamos en esta puntuación de su transparencia. Por ejemplo, la calificación de Aena ha subido en 10 puntos, al pasar de 51,6 (a cierre de 2019) a 61,6 (con datos del ejercicio 2020). Inditex, que con datos de 2019 aparecía como la menos transparente de todo el Ibex -y suspendía, al quedarse por debajo de 50- ha elevado esa puntuación en 8,6 puntos, hasta los 57,9. Por su parte, el fabricante de piscinas Fluidra, a la que Bloomberg otorgaba en 2019 56,6 puntos sobre 100, recibe ahora 64,9 por parte de este proveedor. Viscofan ha pasado de 50 a 57 puntos, y CaixaBank de 46 a 50,9.
Más allá de los límites del indicador español, las compañías que destacan por su transparencia en otros países europeos tienen que ver con sectores tan dispares como el lujo, la tecnología o el motor. En el caso del Cac 40 francés, la cotizada que más información de sostenibilidad proporciona es Kering, antes PPR, compañía dedicada al lujo y a la moda, que obtiene 63,6 puntos sobre 100. La sigue el fabricante de coches Stellantis, con 63,2; las siguen STMicroelectronics, LVMH y L'Oréal, todas con ratings superiores a 60.
En el caso del selectivo alemán, llama la atención la puntuación del laboratorio farmacéutico Bayer, que se coloca en cabeza con un 71,5, seguida de valores como la automovilística Daimler (62,4), BMW (62 sobre 100), la aseguradora Allianz (61,4), Siemens y Munich Re, también con valores por encima de 60.