
OHLA batió ampliamente prácticamente todos sus objetivos operativos en 2024 y gracias al proceso de recapitalización llevado a cabo ha logrado además rebajar drásticamente su apalancamiento, lo que permitirá a la compañía mejorar presumiblemente en marzo la calificación por parte de Moody's. El grupo que preside Luis Amodio, no obstante, aún persiste en pérdidas, con un resultado negativo de 49,9 millones de euros propiciado, entre otras cuestiones, por un ajuste contable realizado en el último trimestre en la valoración del 50% que controla del Proyecto Canalejas de Madrid.
Las pérdidas del cierre de 2024 mejoran, en todo caso, la cifra que presentaba en septiembre, cuando cedía 58,3 millones de euros. Los números rojos contrastan con los 5,5 millones que ganó en 2023.
En términos de ebitda, (resultado bruto de explotación), OHLA selló 2024 con un volumen de 152,6 millones, lo que implica una mejora del 11,3% con respecto a 2023 y del 5,2% en relación al objetivo que se había fijado inicialmente (más de 145 millones).
La compañía también cosechó un comportamiento positivo en sus ventas. De este modo, la cifra de negocios alcanzó los 4.172 millones de euros, un 16% más que en 2023. Este importe rebasa igualmente los al menos 3.800 millones que se había marcado para el ejercicio (+9,2%).
El único objetivo que no ha superado, aunque se ha quedado muy cerca, es del margen ebitda, que se situó en el 3,7%, frente al 3,8% ambicionado. La división de construcción, principal pata del grupo, presentó al cierre del año un nivel del 4,7%, que confronta con el 5,1% de 2023, aunque supera el 3,4% del primer trimestre de 2024. La compañía aspira en su estrategia contratar obras con márgenes que inicialmente superen el 10%.
OHLA afianzó durante el año su capacidad de generación de caja por segundo año consecutivo, de manera que alcanzó los 98,8 millones de euros. Esta cifra supera un 59,4% los al menos 62 millones que había establecido como objetivo y está alineada con los 103,1 millones de 2023. Borra así el consumo de caja que durante los años precedentes se convirtió en una de sus principales losas.
Tras finalizar la recapitalización en febrero, la ratio de apalancamiento financiero se reduce a 2,2 veces, frente a las 3,8 veces de 2023 (en 2019 ascendía a 11,3 veces). Las ampliaciones de capital y el acuerdo con bonistas y bancos ha permitido cancelar deuda por 185,1 millones de euros (pago del cupón y amortización de bonos y cancelación crédito ICO). De este modo, la deuda financiera bruta asciende a a febrero de 2025 a 332,4 millones (cerró 2024 en 523,2 millones y 2023 en 522,6 millones). Desde 2020 la ha rebajado en 534 millones. Esto se combina con la mejora del ebitda.
El grupo destaca que "por primera vez en años, ya se encuentra en niveles comparables al sector". "El compromiso de la compañía será el de seguir disminuyendo esta magnitud, la disciplina financiera continuará acompañando la estrategia de OHLA durante los próximos años", abunda. Según ha detallado el consejero delegado, Tomás Ruiz, durante la presentación de los resultados, la ambición es situarlo por debajo de 2 veces. Para ello cuenta con su operativa ordinaria pero también con las desinversiones futuras de Ingesan, que presumiblemente se acometerá este año aunque sin urgencias, y del Proyecto Canalejas. Este último activo ha sido de nuevo deteriorado, con efecto directo en el resultado neto. En concreto, ha efectuado un un ajuste negativo de 25,5 millones en el valor de la participación respecto al valor en libros de 2023.
A pesar de estar afectada por un duro proceso de refinanciación, la compañía ha logrado continuar su actividad, con los resultados operativos positivos expuestos y también en términos de contratación, que creció el 14% frente a 2023 y un 25% respecto a lo anunciado. En total, la contratación en 2024 ascendió a 5.124,9 millones de euros, asegurando un crecimiento equilibrado y diversificado tanto en términos geográficos como por tipología de proyectos.
Con ello, la cartera total de OHLA alcanzó los 9.224,5 millones de euros, lo que representa un récord histórico para la compañía y asegura una cobertura de 23,7 meses de ventas. Este notable crecimiento evidencia la sólida evolución de esta magnitud desde 2021, cuando la cartera se situaba en 5.800 millones de euros.
La recapitalización ha propiciado alargar los vencimientos del bono hasta diciembre de 2029 y liberar 107,5 millones de euros que tenían retenidos los bancos. Además, ha permitido la entrada de nuevos inversores con posiciones relevantes, entre los que figuran José Elías, presidente entre otras compañías de Audax, el mexicano Andrés Holzer, José Eulalio Poza, Inveready o Coenersol. Estos nuevos inversores tienen un compromiso firmado de permanencia durante un periodo determinado con los acreedores. Los hermanos Luis y Mauricio Amodio, que también aportaron fondos en la segunda ampliación, se mantienen como primeros accionistas con el 21%. Todos ellos comunicaron al mercado la posibilidad de emitir un bono convertible por hasta 50 millones de euros que por el momento continúa en fase de análisis con un experto independiente y será emitido en función de las necesidades de liquidez del grupo.
El principal reto una vez asegurado el refuerzo financiero será no sólo impulsar el crecimiento y regresar a beneficios, sino también impulsar la rentabilidad de la compañía. Para la vuelta al beneficio y para la mejora de los márgenes OHLA cuenta como bazas con las ventas de Ingesan, que rebajó ligeramente su ebitda hasta los 10,5 millones, y con el Proyecto Canalejas, por la que ya ha recibido muestras de interés, si bien su desinversión ha de ser consensuada con su socio Mohari, con el que mantiene viva una disputa arbitral. Además, la firma dirigida, como consejero delegado, por el mexicano Tomás Ruiz, también prevé elevar la rentabilidad gracias un nuevo plan de reducción de gastos de estructuras. Y, como tercera palanca cuenta con su apuesta por los proyectos de concesiones y de desarrollos inmobiliarios que ofrecen mayores márgenes.
A ello agrega la reducción de los gastos financieros tras la reestructuración de la deuda y, eventualmente, resoluciones positivas de algunos de los laudos que tiene en marcha, como el del Metro de Doha (Qatar), así como cobros pendientes (11 millones a corto plazo y unos 20 millones en función de determinadas condiciones) que tiene con el Grupo Villar Mir (GVM).
De cara a 2025, OHLA se ha propuesto alcanzar unas ventas de 4.300 millones de euros, lo que implicaría un alza del 3,1%, y un ebitda superior a los 175 millones (+14,7%). De igual modo, un desafío es mejorar el resultado neto, reforzar la estabilidad financiera y operativa y mejorar el rating. Asimismo, proyecta contratar 4.600 millones de euros en el presente ejercicio, con el foco en proyectos de hasta 500 millones de euros y con planes de crecimiento tanto en concesiones como en desarrollos inmobiliarios, un nicho, este último en el que ya está trabajando en varios proyectos en España. Por ahora el grupo no ha comunicado su plan estratégico ni ha desvelado cuándo lo presentará.