
Sacyr prevé sellar este mes la contratación de los asesores financieros que pilotarán el proceso para buscar un socio para Voreantis, la plataforma en la que aglutinará gran parte de sus activos concesionales. Con la entrada de uno o varios inversores, el grupo que preside Manuel Manrique persigue conseguir liquidez y competir por los macrocontratos de infraestructuras en Estados Unidos.
Sacyr planea vender el 49% de Voreantis, en la que ha colocado sus activos actuales, con el objetivo de recaudar 800 millones de euros , aseguró a Reuters el director financiero de Sacyr, Carlos Mijangos. El plan estratégico de la compañía contempla invertir 1.000 millones de euros en concesiones hasta 2027.
"Vamos a luchar al mismo nivel que otros grandes competidores que tienen grandes activos en Estados Unidos. Ya estamos en esa liga", dijo Mijangos. Ferrovial, ACS o Acciona también están focalizados en el mercado estadounidense.
Sacyr espera que sus asesores financieros contacten formalmente con los inversores en septiembre y cierren un acuerdo a finales de 2025. Por ahora, más de 10 fondos ya se han puesto en contacto con Sacyr, resaltó Mijangos.
El grupo espera aprovechar su crecimiento para conseguir proyectos de concesión de autopistas más grandes y rentables en Estados Unidos y triplicar su valor de mercado desde los 2.600 millones de euros actuales para 2033.
A Mijangos no le preocupa que un cambio de administración en Estados Unidos, en caso de que Donald Trump gane las elecciones presidenciales de noviembre, haga descarrilar los proyectos financiados con fondos públicos, ya que Sacyr tiene intención de pujar principalmente por los desarrollados por los distintos estados y no por el Gobierno federal.
Sacyr ve oportunidades en torno a las principales ciudades de los estados del sureste de Georgia, Tennessee y Luisiana, donde muchas autopistas de 70 años de antigüedad necesitan inversiones. "Hay mucho más que actualizar en Estados Unidos (que en Europa)", afirmó.
Por otra parte, Sacyr está revisando su plan de vender activos en Colombia y Chile y podría en su lugar transferirlos a Voreantis. La empresa también opera en el sur de Europa, Canadá y Australia. "Ahora mismo no es el mejor momento para venderlos porque las valoraciones siguen siendo poco atractivas", dijo Mijangos.