Industria

Starmer finalmente rechaza a Macron: Reino Unido compra a EEUU una docena de cazas nucleares F-35A Lightning II

F-35 del Ejército británico / Royal Air Force.

Finalmente, lo que adelantó el informe estratégico del ministerio de Defensa británico se ha cumplido. Reino Unido adquirirá a Lockheed Martin al menos una docena de cazas F-35A Lightning II, según recoge la agencia Bloomberg. Este paso dado por Londres supone enterrar la esperanza de una compra de aviones Rafale fabricados por Dassault Aviation. Tanto la aeronave francesa como el caza estadounidense tienen capacidad de portar armas nucleares. La compra se enmarca en un contexto en el que el Gobierno de Keir Starmer está aumentando la inversión militar y ha coqueteado con la idea de extender el paraguas nuclear británico. De paso, el primer ministro laboralista cree que así agradará a Trump.

El informe estratégico que el Ejecutivo británico publicó hace dos semanas ponía sobre la mesa la necesidad de adquirir con urgencia aeronaves que pudieran portar bombas nucleares de caída libre. Actualmente, el programa militar atómico de Londres consta de los misiles Trident disparados desde submarinos. El objetivo de Londres es incrementar la disuasión nuclear ante un ataque de Rusia.

Destino atómico de Europa

El único caza europeo con capacidad de lanzar bombas nucleares es el Rafale fabricado por la francesa Dassault Aviation. La alternativa en el mercado occidental es la serie A de los F-35 ensamblados por la estadounidense Lockheed Martin. Los Lightning, además, son indetectables ante la mayoría de sistemas de radar. Sin embargo, la compra de Londres parece responder más a una forma de aplacar a Trump que a una elección estratégica. Y pone sobre la mesa la falta de confianza e integración de las potencias europeas.

Reino Unido ha sido el mayor aliado en Europa de Estados Unidos desde la Segunda Guerra Mundial. El programa nuclear británico fue desarrollado a partir de las armas atómicas estadounidenses. Es uno de los pocos países europeos con arsenales nucleares propios. En otros Estados como Alemania, Italia o Turquía hay ojivas nucleares estadounidenses enmarcadas en bases de la OTAN.

El rearme atómico es una prioridad europea. Tanto París como Londres han sugerido ampliar el paraguas atómico al resto de Europa y capitales como Berlín o Varsovia sopesan abiertamente desarrollar sus propios programas nucleares en una nueva carrera armamentística. El objetivo es poder disuadir a Rusia. La mayor potencia atómica del planeta, superior a EEUU, posee un arsenal compuesto por 5.400 ojivas que pueden ser disparadas desde silos en tierra, submarinos en los océanos y cazabombarderos en el aire, según cifras del Instituto Internacional de Estocolmo.

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