
Indra se volcará en los próximos años en el sector de la defensa y pujará por la fabricación de nuevos blindados más allá de los 8X8 contratados con el ministerio de Defensa por 2.400 millones de euros.
En esta ocasión, sin embargo, lo hará al margen de Tess Defence, la empresa creada junto a Santa Bárbara, Sapa y Escribano Mechanical & Engineering (E&ME), con la que logró esta adjudicación. Debido a los numerosos problemas y retrasos acumulados con el 8X8 Indra ha decidido romper con Sapa y Santa Bárbara -no así con Escribano, con la que está estudiando una posible fusión- y acudir a partir de ahora a las licitaciones en solitario.
Ese es el objetivo, precisamente, por el que ha cambiado los estatutos para la fabricación de armamento y, por el que ha constituido también la nueva división Indra Land Vehicles. La producción de blindados es uno de los ejes sobre los que pilota, de hecho, el nuevo plan estratégico (Leading the future) de la compañía que preside Ángel Escribano hasta el año 2030. La tecnológica planea ser un actor de referencia en la industria de defensa y que la mitad de sus ingresos provengan de este área.
Puja por Iveco Defence
De hecho, esa es la razón por la que está pujando por Iveco Defence, la división del gigante de la automoción italiano especializada en estos vehículos. Indra ha sido seleccionada ya en la lista corta para la puja junto a un consorcio formado por la alemana Rheinmetall y la italiana Leonardo; el fondo Bain Capital y una firma australiana. Todo ello al margen también de la posible fusión con Escribano, que es la empresa encargada de la fabricación de las torres de los vehículos de combate 8X8 Dragon del Ejército de Tierra.
Y en la misma línea también, la empresa tecnológica competirá además junto a Rheinmetall contra Santa Bárbara por el contrato de renovación de la flota de más de 200 blindados Leopard 2E que el ministerio de Defensa planea sacar a concurso.
Dentro del plan estratégico para ser un gigante de defensa, Indra tenía inicialmente la idea de adquirir la fábrica de armas de Trubia en Oviedo, que pertenece a General Dynamics, la matriz de Santa Bárbara, pero el grupo estadounidense se opuso en rotundo a una desinversión, lo que provocó un enfrentamiento entre las dos empresas y habría animado ahora a Indra a lanzarse a la producción de blindados por separado.
Retraso del 8X8
En cualquier caso, son varios los enfrentamientos que Indra ha tenido en los últimos meses con Santa Bárbara y Sapa, especialmente como consecuencia de los retrasos en la fabricación de los 8X8, lo que ha provocado un cruce de reproches y acusaciones, con la tensión añadida por la sanción de 9,2 millones de euros que impuso el Gobierno.
Santa Bárbara era partidaria de recurrir en un primer momento la multa en los tribunales, pero el resto de socios del consorcio se opusieron. Para poner fin al conflicto, el consejo de administración Indra aprobó el pasado mes de septiembre la adquisición de una posición mayoritaria, del 51%, en el consorcio Tess Defence.
Fabricación de armamento
Más allá de los blindados, Indra ha aprobado también un cambio en sus estatutos que le permitirá la fabricación de armamento. La modificación de los mismos ha sido aprobada ya por el consejo de administración y está pendiente tan solo del visto bueno de la junta de accionistas. Indra estaba centrada hasta ahora en su negocio tradicional, basado en la electrónica de defensa y la alta tecnología con radares y sensores de última generación.
El anterior presidente de la compañía, Marc Mutra, ahora en Telefónica, intentó ya el desembarco en el negocio de la munición y el armamento, pero no logró sacar adelante el plan, algo que ahora sí que ha hecho Ángel Escribano.
Hay que tener en cuenta que el gasto en armamento se va a incrementar con el objetivo de que España alcance este mismo año un gasto del 2% del PIB en defensa -equivaldría a 33.213 millones de euros-, algo para lo que el consejo de ministros aprobó el pasado 22 de abril un gasto adicional de 10.471 millones de euros.
Máximos con Ángel Escribano
Desde que Ángel Escribano fue nombrado presidente de la tecnológica el pasado 20 de enero de 2025, la acción de la compañía ha subido un 94%. En concreto, desde el arranque de año, sus títulos se han revalorizado más de un 107%. Algo que ha posicionado a la compañía como la primera cotizada del Ibex 35 en conseguir estos datos y en registrar un récord desde 1998. En cualquier caso, desde primeros de enero, Indra ha marcado en más de una treintena de ocasiones nuevos máximos anuales e históricos, superando ya los 35 euros por acción. A cierre del mercado de este miércoles, el título se ha situado en 36 euros