
El consejo de administración de Indra se ha convertido en un polvorín ante el proyecto de fusión con Escribano. Tras la salida de Francisco Javier García, consejero independiente de la compañía, el director general de la filial Minsait, Luis Abril, ha anunciado su dimisión a partir de la próxima junta en junio. Abril había participado y aprobado el plan estratégico de la compañía, que contempla las adquisiciones y crecer a través de defensa, pero se ha opuesto a la integración con la empresa familiar Escribano Mechanical & Engineering (EM&E), controlada por el presidente del grupo Ángel Escribano, junto a su hermano Javier.
Según las fuentes consultadas, el presidente de Indra, ha propuesto su salida del consejo, ante lo que Abril, que terminaba en junio su mandato, ha decidido renunciar. Todo además después de que la compañía hubiera estado negociando la posible venta de su principal filial con Apax Partners, cuya oferta acabó sin embargo rechazando. El consejo está pendiente ahora de la renovación de seis de los siete independientes. Además de García vence el mandato de Bernardo José Vilazán, Belén Amatriaín, Coloma Armero, Olga San Jacinto, Virginia Arce. Sólo Ángeles Santamaría, renovada en junio de 2023, está exenta del refrendo de la Junta de Accionistas de este trámite de entre los consejeros independientes.
Muchos de ellos se oponen a la fusión al vencer su mandato serán sustituidos. El que seguirá es el representante de Sapa, Jokin Aperribay, consejero delegado y propietario de la firma vasca, que también se ha opuesto tanto a la operación como al plan estratégico.
Ángel Escribano, tiene atado el apoyo mayoritario del capital para todos estos planes -cuenta con el respaldo de la Sepi, titular del 28%; de Escribano con el 14,3% y de Josep Oughourlian, propietario de otro 7,24%- pero la situación en el consejo es distinta. De los 16 miembros que integran el mismo, el presidente solo tiene garantizados ahora mismo seis votos: el suyo; el del consejero delegado, José Vicente de los Mozos; el de su hermano Ángel Escribano, presidente de EME; y el de los tres representantes de la Sepi: Antonio Cuevas, Juan Moscoso y Miguel Sebastián. La falta de mayoría en el máximo órgano ejecutivo es lo que le obliga a renovar el consejo de administración y sustituir, por ejemplo, a los independientes.
El plan estratégico de Indra contempla crecer en el sector de la defensa y para ello se ha puesto tanto la fusión con Escribano como la compra de Iveco Defence, la división de vehículos blindados del gigante de la automoción italiano Iveco. La primera operación se llevaría a cabo a través de una ampliación de capital y posterior intercambio de acciones, que permitiría a los hermanos Escribano alcanzar cerca del 30% del capital de Indra, una participación similar a la de la Sepi. En el segundo, la empresa española ha quedado finalista junto a una empresa conjunta entre Rheinmetall y Leonardo; el fondo Bain Capital y una firma australiana.