
Mañana de movimiento en el Departament d'Empresa de la Generalitat. Apenas 48 horas después de la sentencia que entrega Celsa a los fondos, los Rubiralta se vieron con el conseller de Empresa, Roger Torrent, para tratar de recabar su apoyo en el intento de presionar al Gobierno para que frene la operación con la ley antiopas. Empresa y Generalitat siempre mostraron sintonía, pero la administración catalana no se cierra a escuchar al resto de actores. En la misma jornada se reunió también con Manuel Martínez-Fidalgo, dirigente de Houlihan Lokey -la entidad que coordina a los acreedores- para conocer el proyecto que tienen para la siderúrgica los tenedores de la deuda.
Los encuentros tuvieron lugar este miércoles por la mañana en la sede del Departament d'Empresa de la Generalitat de Catalunya, en el Paseo de Gracia de Barcelona, según pudo saber este medio. A ver al dirigente acudieron Francesc Rubiralta, consejero delegado, y su vicepresidente, Francesc Mesegué, directivo de larga trayectoria en el grupo y uno de los hombres más fieles a la familia. Torrent estuvo acompañado por el director general de Industria, Oriol Alcoba Malaspina, y el secretario de Empresa y Competitividad, Albert Castellanos.
Luego escucharon los planes de Houlihan Lokey, la firma que ha coordinado a Deutsche Bank, SVP, Cross Ocean y el resto de fondos, por boca de Martínez-Fidalgo, que se desplazó a la capital catalana tras verse el día antes con Manuel de la Rocha, secretario general de Asuntos Económicos del Gobierno.
La reunión se produjo así después de la siderúrgica ya advirtiera de que "llevaría a cabo las acciones necesarias junto a sus grupos de interés -entre los que cuenta la Generalitat- para asegurar la continuidad del proyecto industrial". Ir de la mano del Govern al Ejecutivo para frenar el cambio de accionistas refuerza a los Rubiralta. Más en un momento en el que el Gobierno está en funciones y depende de los votos de las formaciones soberanistas para reeditar mandato.
Mañana intensa en el 'Departament d'Empresa', que recibió a Rubiralta y a los fondos
La administración autonómica siempre reiteró la necesidad de mantener la integridad y los puestos de trabajo en Cataluña. El más explícito fue el president Pere Aragonès en abril. "El Govern está y estará a vuestro lado", remarcó. En ningún momento se mencionó el conflicto con los fondos, pero quedó claro que ambas partes iban alineadas.
El apoyo de la Generalitat, de lograrlo definitivamente, suena insuficiente entre los despachos de abogados con experiencia en solicitudes a la ley antiopas. Las fuentes consultadas por elEconomista.es señalan que los fondos deberán pedir la autorización del Gobierno, pero que casi con seguridad se les otorgará el visto bueno, como así ha sucedido en el resto de adquisiciones en sectores estratégicos como el energético, la defensa o las nucleares. "Ninguna operación se ha frustrado por el escudo, es una medida disuasoria", señalan.