
Río Narcea reiniciará la actividad de la mina de Aguablanca, en la localidad extremeña de Monesterio, siendo esta la única mina operativa de níquel en España.
La vida útil de la mina se estima en unos 10 años, con una extracción de 3 millones de toneladas de minera, lo que supone una facturación estimada anual, con la cotización actual del níquel, de 335 millones de euros en los 6 primeros años de operaciones.
Así lo ha explicado a elEconomista.es el consejero delegado de la compañía, Alejandro Ayala, que asegura que con la puesta en marcha de esta mina se "inicia la revolución verde en Extremadura".
"Ya hemos recibido todas las autorizaciones para reiniciar los trabajos de extracción minera en Aguablanca, que forma parte de la cadena de valor del almacenamiento energético, iniciándose así el proceso transformador de la economía regional", asegura el empresario extremeño, que además de esta mina está trabajando para conseguir entre finales de este año y principios del siguiente los permisos para una mina de litio, también en la región.
Aguablanca, que llevaba ocho años cerrada, está ahora en disposición de comenzar inmediatamente los trabajos para acometer las labores preparatorias antes de la entrada en producción, si bien para iniciar el bombeo del agua almacenada en la corta se está pendiente de la autorización de la Concesión de Aguas por parte de Confederación Hidrográfica del Guadalquivir.
"Estos trabajos se prolongarán a lo largo de 10 meses durante los cuales se generarán 40 puestos de trabajo, que se verán incrementados hasta los 330 cuando se inicien las operaciones en el verano del año que viene, 2024", explica Ayala.
El empresario, junto a un grupo de inversores, adquirió la mina en 2021 a Valoriza Minería, una empresa de Sacyr, y desde entonces han trabajado para poder reactivar su actividad, puesto que el níquel está catalogado junto al litio "como material estratégico por la UE para la no dependencia de países asiáticos".
Actualmente tenemos licencia para operar la mina durante seis años, en los que acometeremos una inversión total de 25 millones de euros", apunta el directivo. Ocho millones serán antes del inicio de la explotación, 9 millones se dividirán en una inversión anual de 1,5 millones para infraestructuras y desarrollos, y una inversión final para clausura y restauración de 8 millones.
Proyecto de gran alcance
La reapertura de esta mina forma parte de un proyecto de mayor envergadura que está encabezado por Ayala y que contempla la puesta en marcha de una fábrica de supercondensadores y un centro de i+D en Badajoz con una inversión prevista total de alrededor de 100 millones de euros. Estos dos proyectos se engloban dentro de la empresa tecnológica Phi4tech, que consumirá "alrededor de un 10% de la producción de la mina de níquel", apunta el empresario.
Ayala también está al frente del grupo inmobiliario Civitas, que se encargará de promover vivienda en la zona para dar respuesta a la demanda que se va a generar con la creación de 1.000 puestos de trabajo entre directos e indirectos en los próximos meses.
Eslabón clave en la estrategia europea
Aguablanca es un yacimiento estrechamente ligado a las localidades de Monesterio (Badajoz), El Real de la Jara (Sevilla) y Santa Olalla del Cala (Huelva). Su emplazamiento geológico y los metales que acoge convierten a esta mina en un eslabón clave dentro de la Estrategia Europea para las Materias Primas Fundamentales, aprobada por el Parlamento Europeo para garantizar el suministro estratégico, al que se aportaría níquel y cobre.
Así pues, la reapertura de la mina de Aguablanca supone una nueva oportunidad de desarrollo industrial para esta comarca, con la sostenibilidad como eje transversal del proyecto. Esta nueva fase minera se centrará exclusivamente en trabajos de interior y un aprovechamiento de las instalaciones ya existentes: industriales (planta de beneficio), auxiliares (almacenes, laboratorios, talleres, oficinas, etc.), así como la actual balsa de estériles.
La compañía especifica que en esta nueva etapa en Aguablanca reutilizará todas las infraestructuras y servicios asociados al proyecto de minería a cielo finalizado a finales de 2015 y se apostará por un manejo de los recursos disponibles con metodología sostenible, especialmente en el caso del agua (Vertido Cero).
Asimismo, la reactivación de la operación extractiva aprovechará al completo todas las instalaciones existentes para el capítulo clave de la restauración y cierre, etapa que cuenta con el aval del trabajo realizado en la etapa anterior, perfectamente integrado ya con el medio natural que rodea a la mina. Las reservas de níquel y cobre de este enclave son pieza fundamental para este autoabastecimiento de minerales clave que promueve la Unión Europea, en sintonía con otros proyectos en la Ossa Morena, como elemento esencial para el desarrollo de nuevas tecnologías sostenibles y estratégicas en las que Extremadura jugará un papel clave. Labores Preparatorias Mina Aguablanca.
Reacciones en la Junta de Extremadura
La consejera de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Sostenible, Mercedes Morán, ha valorado este lunes como una "magnífica noticia" la reapertura de la mina de Aguablanca de Monesterio, conocida en el día de hoy, y que supone un ejemplo de las "infinitas oportunidades" que tiene Extremadura para la generación de empleo y riqueza.
Además, Morán ha destacado que se trata de una "noticia muy esperada" por Monesterio y su comarca debido a la inversión que supone, así como por los puestos de trabajo que se crearán gracias a la misma.
Del mismo modo, la consejera ha subrayado el potencial minero de la región como se ha podido comprobar, ha dicho, en los últimos tiempos con el litio y ahora con el níquel y el cobre que se extraerán en Aguablanca.
Mercedes Morán también ha resaltado que se va a preservar el valor ecológico de la zona, se producirá vertido cero y el proyecto, además, contempla una restauración del entorno una vez finalizados los trabajos mineros. "Un ejemplo de que el desarrollo no está reñido con la conservación del medio ambiente", ha considerado.
Finalmente, ha agradecido a los promotores de este proyecto, Río Narcea, el haber apostado por esta mina y por Extremadura, y ha defendido que la Administración regional siempre estará al lado de los proyectos que sean beneficiosos para la región.