La Paloma Cerámicas ha anunciado la adquisición de Cerámica Malpesa,empresa radicada en Bailén (Jaén) con tradición centenaria y considerada una de las más potentes de España en fabricación de ladrillo caravista y adoquín cerámico. Se trata, indican desde La Paloma, de "un movimiento estratégico que fortalece nuestro liderazgo en el mercado y nos permite ofrecer el portafolio más completo".
"Ahora podemos ofrecer ladrillos caravista, ladrillos prensados, adoquines cerámicos y sistemas constructivos como Termoklinker, Iris o Maps. Estos productos no solo son de gran calidad y demanda a nivel nacional e internacional, sino que también son respetuosos con el medio ambiente gracias a nuestras políticas de uso eficiente de los recursos y minimización de impactos ambientales", indican desde La Paloma.
La compañía La Paloma con sede en Pantoja (Toledo), tenía en 2021 unos 250 empleados y una facturación de 50 millones. Tras la compra asegura que los tres centros de producción de Cerámica Malpesa en Bailén "seguirán operando a pleno rendimiento, lo que garantiza la continuidad de la marca y la estabilidad de todos los puestos de trabajo". Actualmente hay unos 60 trabajadores en esas instalaciones.
Tecnología
Malpesa fabrica más de 400.000 toneladas al año de productos cara vista para fachadas y suelos. En las crisis de la construcción en 2008, la empresa apostó por una auténtica revolución tecnológica, desde las mezclas por pesada continua en vía seca, hasta el secado y la cocción en hornos computerizados, o mover los ladrillos con robots.
Esa innovación le permitió ser una de las pocas empresas de Bailén que sobrevivió a la crisis. Antes de estallar la burbuja de la construcción en Bailén se fabricaba uno de cada tres ladrillos de España. De 70 fábricas, quedaron tras las crisis menos de una decena.
La compañía jienense exporta buena parte de su producción a mercados internacionales, entre los que destaca Japón, Estados Unidos o Taiwan, entre una veintena de destinos.
Expansión
"Esta adquisición también marca un importante paso en nuestra estrategia de crecimiento y expansión internacional. Desde nuestro inicio en 1979, La Paloma Cerámicas ha establecido su reputación en el mercado gracias a nuestra capacidad para ofrecer productos de alta calidad y nuestra atención a la innovación tecnológica. Ahora, con la incorporación de Cerámica Malpesa, abrimos nuevas vías para expandir nuestra presencia en el mercado global del ladrillo", indica la empresa compradora.
Julio Pascual, Director General de La Paloma, destaca que "la integración de Malpesa en nuestro Grupo es una gran oportunidad tanto para comunicar a arquitectos y promotores las ventajas del ladrillo caravista, como su calidad, durabilidad y su nulo mantenimiento de fachadas, además de sus infinitas posibilidades estéticas".