
Wall Street corta su rally alcista y consolida. Los principales índices de la Bolsa de Estados Unidos han cerrado la sesión con descensos lastrados por la fuerte caída del petróleo. Si en los días previos los principales selectivos estadounidenses habían esquivado las pérdidas, el dato de exportaciones de China ha sido la excusa perfecta para consolidar posiciones.
El Dow Jones cayó un 0,64%, hasta los 16.964,1 puntos, mientras que el S&P 500 retrocedió un 1,12%, hasta los 1.979,26 mientras que el Nasdaq perdió el 1,26%, hasta los 4.648,82 enteros. El Dow Jones perdió los 17.000 puntos y el S&P 500 los 2.000.
Si bien en las últimas sesiones parecía que China permitía que los mercados se tranquilizasen, en la sesión de este martes ha vuelto a centrar los ojos de los inversores. Así, en la jornada se ha conocido que en febrero las exportaciones del gigante asiático descendieron un 20,6% interanual lo que, según Felipe López-Gálvez, analista de Self Bank., significa "la mayor caída en seis años para este indicador".
Este dato ha vuelto a mover a la baja al crudo que no ha logrado mantenerse por encima de los 40 dólares reconquistados ayer, llevándose tras él a las firmas energéticas y finalmente a los principales indicadores de ambos lados del Atlántico. Con las empresas relacionadas con la energía también se han sumado a las pérdidas los bancos ya que incrementa el riesgo de impago del sector petrolero a la vez que una tardía subida de tipos en Estados Unidos podría afectar a sus previsiones de beneficios.
Todo ello en unas jornadas en las que los inversores están mirando con recelo hacia el Banco Central Europero y, más concretamente, hacia su presidente, Mario Draghi, con motivo de la reunión que la entidad mantendrá este jueves y en la que, previsiblemente, se incrementarán las medidas de estímulo monetario impulsadas por el italiano hace un año.
Pese a ello, Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader, señala que "la caída experimentada en la jornada no es nada rara si atendemos a las fuertes subidas previas por lo que no es más que una simple consolidación muy antes de resistencias".
En el Viejo Continente también se han impuesto con claridad los bajistas. Pese a ello, Cabrero señala que estas pérdidas no son más que "una consolidación de las fuertes subidas previas que llevaron a los selectivos a su objetivo mínimo de subida".
Situación de corto plazo:
Ligeros descensos en Wall Street que no provocan ningún cambio analítico destacable dentro del movimiento de corte consolidativo que están desarrollando los índices durante las últimas sesiones y que, de momento, consideramos que es una simple pausa en sus ascensos.
De hecho, al igual que en las bolsas europeas, no nos sorprende este movimiento de consolidación, toda vez que un índice tan importante como el S&P 500 alcanzó el pasado viernes un 61,8% de recuperación de toda la última gran caída que tuvo su origen en la zona de resistencia de los 2.130 puntos. Además, este entorno psicológico de los 2.000 puntos ya ha servido en varias ocasiones en los últimos meses como soporte y resistencia alternativamente, ahora resistencia.
La consolidación no será demasiado relevante mientras no provoque la pérdida de la directriz alcista de aceleración que mostramos en el chart adjunto y que ayer funcionó a la perfección en el S&P 500. Su cesión podría retrasar el alcance del objetivo teórico mínimo de subida que surge de proyectar la amplitud del patrón alcista que confirmó el S&P 500 tras batir resistencias de 1.947 puntos, concretamente los 2.094 puntos. Un escenario alcista de alcanzar ese objetivo solamente se pondría en jaque si una eventual corrección provocara la pérdida de esa directriz alcista señalada así como los mínimos vistos la semana pasada, que en el S&P 500 se localizan en los 1.930 puntos. Lee la situación tendencial en Ecotrader Premium.
La sesión:
Los operadores en el parqué neoyorquino apostaron por las ventas desde los primeros compases de la jornada arrastrados por una caída del petróleo en los mercados internacionales y un dato peor de lo esperado sobre la economía china.
El barril de Texas, de referencia en Estados Unidos, bajó un 3,69% y cerró en Nueva York en 36,50 dólares, mientras el crudo Brent, de referencia en Europa y otros mercados, cayó un 3,06% y terminó en Londres en 39,59 dólares.
Salvo el de empresas de servicios públicos (0,26%), el resto de sectores terminaron en números rojos, como el energético (-4%), el de materias primas (-3,90%), el financiero (-1,50%), el industrial (-1,28%), el sanitario (-1,15%) o el tecnológico (-0,92%).
Caterpillar (-4,07%) lideró las pérdidas en el Dow por delante de Goldman Sachs (-2,46%), Exxon Mobil (-2,17%), Chevron (-2,13%), JPMorgan (-1,94%), Visa (-1,83%), DuPont (-1,82%), Disney (-1,58%), Pfizer (-1,41%), Intel (-1,23%) o Apple (-0,82%).
Al otro lado de la tabla encabezó los avances Microsoft (1,21%) por delante de McDonald's (1,08%), Nike (0,98%), Travelers (0,96%), Home Depot (0,93%), American Express (0,73%), Coca-Cola (0,70%), Verizon (0,50%) y Walmart (0,22%).
Al cierre de la sesión bursátil el oro cedía a 1.262,2 dólares la onza, la rentabilidad de la deuda pública a diez años bajaba al 1,833% y el dólar ganaba terreno frente al euro, que se cambiaba a 1,1007 dólares.