Cómo hacer agua de fresas: la bebida rica en vitamina C que te ayudará a bajar de peso y a desintoxicar el hígado
Las fresas son esa fruta de temporada que alcanza su mejor momento en los meses de febrero a junio, aproximadamente. Es tierna, jugosa, fácil de comer y suele encantar a casi todo el mundo. Contiene gran cantidad de propiedades y beneficios para la salud, y uno de sus puntos más positivos es que es muy versátil y fácil de comer.
Al natural, en postres, con azúcar, en ensaladas, en granizados o en batidos son algunas de las múltiples formas de comer fresas. No obstante, una de las formas menos conocidas es preparando agua de fresas.
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1. El agua de fresas
El agua de fresas es recomendable todos los días, ideal para los meses de más calor por su refrescante sabor. Para preparar esta receta tan solo serán necesarias entre 5 y 10 freses, el jugo de medio limón y unas dos hojitas de menta.
Una vez se tengan todos los ingredientes bien lavados, se han de pasar por la batidora, obteniendo una mezcla homogénea. Si se incluyen unos cubitos de hielo, la bebida será aún más agradable.
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2. Nutrientes
Las fresas son ricas en vitaminas y minerales, mayoritariamente, como manganeso, ácido fólico, hierro, cobre, magnesio y fósforo. Además, tiene un alto índice de vitamina C, lo que la hace especialmente recomendable para las personas que sufren de anemia, puesto que ayuda a la absorción de hierro.
Se componen en un 85% de agua, lo que hace que su nivel de calorías sea muy reducido. Si se está en un proceso de pérdida de peso, son una opción ideal.
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3. Beneficios
Determinados alimentos como esta fruta ayudan a la eliminación de sustancias tóxicas que se almacenan en el organismo, especialmente en zonas como el hígado o los riñones, estos gracias a su poder diurético.
Por otro lado, su alto contenido en fibra hace que sean ideales para combatir el estreñimiento y mejorar el tránsito intestinal. Sus propiedades antiinflamatorias repercuten positivamente en la salud general.
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4. De dónde viene
La fresa es una fruta que originalmente se podía encontrar de forma silvestre, aunque su cultivo comenzó a darse ya en el siglo XVIII. En muchas partes del mundo se conoce como la "reina de las frutas", puesto que además de su característico sabor, también contiene gran cantidad de beneficios para la salud.
Es originaria de los Alpes, aunque hoy en día ya se ha extendido por todo el mundo, creando nuevas variedades más grandes y con más sabor.
