
Las altas temperaturas ya han llegado para quedarse y con la amenaza de la primera ola de calor muchos son los que ya planean su escapada. Buscar refugio estos días es muy necesario y, aunque se eviten las horas pico de sol, resulta complicado pasar la jornada sin aire acondicionado o, en su defecto, una zona para bañarte. Por suerte, cerca de la capital hay oasis naturales que ayudan a muchos madrileños a pasar estos días de tanto calor con un día de baño. Uno de los más populares es el de Las Berceas, en Cercedilla.
Esta área recreativa se encuentra en pleno Valle de la Fuenfría, lo que es parte del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama. Esta zona bien merece una visita durante todo el año, pero es ahora cuando las piscinas naturales de Las Berceas ofrecen el mejor momento para familias y grupos de amigos.
A 1.400 metros de altitud entre pinares y montañas, se encuentran dos grandes piscinas de agua tratada que se integran a la perfección en el entorno natural. Puede que sus aguas no vengan de manantiales de manera directa, pero su calidad está asegurada por su sistema de depuración.
Apertura de las piscinas
Con todos los servicios esta zona de baño pensada para todos los públicos ya está abierta desde principios de junio hasta mediados de septiembre. Vestuarios, merenderos, zonas de bar, aseos, zonas verdes y hasta un parque arbóreo.
Cuenta con zonas habilitadas a personas con movilidad reducida, además de una capacidad de 2.000 habitantes y en fin de semana se ofrece un autobús gratuito desde la misma estación de Cercedilla.
De lunes a viernes, la entrada general (adultos de 14 a 64 años) cuesta 9€, mientras que en fines de semana y festivos sube a 12€. Por su parte, los niños (a partir de 5 años) y los mayores de 65 años pagan 5€ entre semana y 7€ en fin de semana y festivos, en general más caro que otras piscinas naturales de la localidad.
Hay que tener en cuenta que las mascotas, menos los perros guías, las hamacas, hinchables y balones están prohibidos, aunque como en todas estos recintos esto puede variar.
Como suma adicional, si se dispone de coche, su cercanía al pueblo de Cercedilla permite completar la jornada con actividades de todo tipo antes o después de bañarse. Muchos son los que hacen rutas por aquí, como el Camino Schmidt o la Calzada Romana.
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