El Gobierno presidido por Pedro Sánchez ha dado marcha atrás en la aprobación e implantación del Fondo de Sostenibilidad y al recorte a los ingresos a las centrales eléctricas no emisoras y mayor antigüedad por el coste de emisión de CO2, que tenía como objetivo rebajar los beneficios de las energéticas.
En vísperas del nuevo paquete legislativo que se llevará al Consejo de Ministros extraordinario de este sábado, se ha decidido que finalmente no sea convocada la Comisión de Transición Ecológica que el próximo 28 de junio pretendía dar luz verde al denominado 'céntimo verde' a petroleras y gasistas.
En un momento en el que el precio de la gasolina está por encima de los dos euros y en el que el Ejecutivo va a prolongar la subvención a los carburantes, se ha optado "por prudencia" retrasar el debate de estas leyes hasta el mes de septiembre, según confirman fuentes cercanas a Transición Ecológica. A esto se le suma la falta de apoyo parlamentario, sobre todo por parte del PNV y ERC, y la "contradicción" que existe entre algunas medidas que prevé aprobar el Gobierno en el Consejo extraordinario.
Fondo de Sostenibilidad
La intención que tenía con este fondo la vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, era repartir entre todo el sector de la energía la financiación de los costes energéticos que hasta ahora eran sufragados por las eléctricas. Un recargo que iba a tener impacto directo sobre los consumidores de gas, gasolina y diésel, ya que el coste supondría unos 7,5 céntimos de euro por litro de combustible más.
En el caso del mecanismo de minoración de los ingresos extra de las centrales eléctricas que no emiten CO2, principalmente nucleares e hidroeléctricas, y que se benefician de la subida de los derechos de emisión, algo muy criticado por las grandes eléctricas, fue presentado hace ya casi un año y también estaba previsto que se votase en la Comisión de Transición Ecológica la próxima semana.
La aprobación del Fondo Nacional para la Sostenibilidad del Sistema Eléctrico (FNSEE) había sido objeto de duras críticas no solo por empresas del sector energético, sino también por parte de patronales industriales, especialmente por la gasintensiva, por el impacto que esta decisión iba a tener en sus costes en un momento con tanta inestabilidad como el actual.
Según Sedigas, patronal gasista, el fondo perjudica a la competitividad del sector industrial español. Por su parte, la presidenta de la CNMC, Cani Fernández, ha asegurado que los márgenes del sector petrolero se han reducido por el alza de los costes, "en la gran mayoría de los casos no hemos detectado la absorción de las ayudas por las gasolineras, en realidad para muchos operadores los márgenes se han reducido por la alta competencia".
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