
Las compañías eléctricas aumentan la presión sobre Bruselas para intentar frenar el tope ibérico de 30 euros por megavatio hora (MWh) del gas natural para la generación de electricidad (ciclos combinados y de cogeneración) que España y Portugal quieren aplicar, con el finde abaratar la factura eléctrica.
Las patronales de las grandes eléctricas españolas (Aelec) y portuguesas (Elecpor) -apoyadas por directivos de Iberdrola, Endesa y EDS- cuestionan la existencia de una "isla energética" en la Península Ibérica, el principal argumento del Gobierno. Y es que, aunque sí es cierto que las interconexiones de España y Francia (y por ende, con el resto de Europa) son escasas, los precios en los mercados de la luz de ambos países han sido similares en la mitad de las horas desde que se inició la invasión de Ucrania.
Del mismo modo, las patronales defienden que este tope tendría un impacto en los contratos a precio fijo. Y es que, según explican, en España la reducción de precios solamente beneficiaría a los clientes con contratos en el mercado regulado (PVPC) y las grandes industrias que acuden cada día al mercado (cerca de un 30% de los clientes). Mientras, el resto de clientes tendrían que pagar la diferencia entre el precio al que se tope el gas y al que cotice en el mercado.
Según ha adelantado el diario La Vanguardia, los propios reguladores del sistema eléctrico de España y Portugal y los reguladores del Mercado de Derivados (MEFF) y de la Cámara de Compensación (BME Clearing), en una carta remitida el viernes pasado a los secretarios de Energía y los reguladores de los mercados financieros de España (CNMV) y Portugal (CMVM), han alertado de "importantes y relevantes impactos en los mercados a plazo de derivados ya contratados y no aún liquidados".
El sector ha pedido que si se topa el precio del gas, sea de forma conjunta en todos los países de la Unión Europea o, en caso contrario, que la norma que se apruebe "determine, por seguridad jurídica y económico-financiera, el precio único de referencia OMIE, que servirá de subyacente para todos los contratos de derivados de electricidad en el mercado ibérico".
Reunión con Vestager
Según se recoge en la agenda de la Comisión Europea, la ministra Teresa Ribera se reunirá mañana mismo en Bruselas con la comisaria europea de Competencia Margrethe Vestager, junto con el ministro portugués de Medio Ambiente José Duarte Cordeiro, para abordar la propuesta.
Ribera ya señaló que se estaba trabajando para que a principios del próximo mes de mayo pudiera estar "aprobada y aplicada ya" la excepción ibérica. "Nuestra intención, nuestra expectativa, nuestra convicción es que, porque además así lo entiende también la Comisión Europea, a principios de mayo podamos tener esto aprobado y aplicado ya en nuestro país y en Portugal", aseguró.
Asimismo, la vicepresidenta afirmó que se estaba trabajando con Bruselas en "algunos aspectos técnicos que todavía no están resueltos" y, además, explicó que el hecho de que "haya coincidido" con los festivos de Semana Santa ha provocado "no poder apurar los días" como les gustaría.