
Uber y Cabify están concentrando su crecimiento en Madrid, donde todavía pueden operar con total libertad. Según los últimos datos publicados por el Ministerio de Fomento, la capital de España ha arrancado el mes de julio con 8.033 licencias de VTC en activo, lo que implica un alza del 9% en apenas dos meses (unas 658 más) por la resolución de sentencias judiciales.
Así, mientras su aumento se ha ralentizado en Comunidades Autónomas como Cataluña, Valencia o Cantabria, donde algunos meses hay más y otros menos en función de los plazos de renovación, Madrid ya concentra el 52% de las VTC que hay en España y recorta las distancias con el taxi, que en julio suma 15.619 licencias en activo. Así, ya hay dos taxis por cada licencia de VTC, ratio que se rebaja a uno los fines de semana, cuando la mitad del gremio tiene que descansar obligatoriamente (la matriculas pares un fin de semana y las impares, el siguiente).
Pero esta explosión de licencias, que se suma a la llegada de coches de otras CCAA donde la actividad está más limitada, como Barcelona o Cantabria, no se está traduciendo en un crecimiento tan fuerte como el registrado hace un año. No en vano, las compañías están empezando a tener problemas para encontrar conductores para los vehículos que trabajan para Uber y Cabify por los salarios y las condiciones. Así, según explican fuentes del sector, hay flotas enteras de vehículos negros con la bandera de Madrid en la parte trasera paralizados en campas en las afueras de la capital o en polígonos industriales a la espera de trabajadores.
En esta línea, fuentes de Cabify confirmaron a este diario que "existen problemas para encontrar conductores en Madrid y Barcelona" ya que no es un trabajo que resulte atractivo a los jóvenes y existe mucha movilidad. "Se pueden ganar hasta 1.400 euros al mes si se hace bien el trabajo y 1.000 si el desempeño es normal, pero la gente joven no ve este trabajo como algo serio o atractivo. Tenemos más éxito entre la gente de más de 45 años", explican estas mismas fuentes.
Pese a la dificultad de encontrar mano de obra, lo cierto es que Madrid sigue siendo el principal mercado de Uber, Cabify y las firmas titulares de las licencias, y donde más potencial de crecimiento tienen. No en vano, es una de pocas CCAA en las que no se ha regulado el sector para limitar su actividad, como se ha hecho en Barcelona o Valencia, donde es obligatorio esperar al menos 15 minutos para solicitar el servicio. Andalucía es otro mercado en el que también se está creciendo y actualmente hay 2.312 licencias registradas, lo que implica un ratio de casi 4 taxis por cada VTC, muy lejos del 1/30 que se recoge en la ley como base.
Liberalizar el taxi
En Madrid, el gobierno de la Comunidad optó por liberalizar un poco la actividad del taxi para darle herramientas con las que competir con Uber y Cabify, aunque todavía no se han puesto en marcha por el cambio de Gobierno. El reglamento se aprobó antes de las elecciones y el nuevo Ayuntamiento (PP, Ciudadanos, Vox) tienen que desarrollar una nueva normativa para poder introducir el taxi compartido y el precio cerrado en los viajes precontratados a través de una aplicación. Algunas fuentes explican que ya estaría trabajando en un texto nuevo. De cara a evitar que la flota de taxis y Uber y Cabify se equipare durante los fines de semana, una de las grandes preocupaciones del gremio, se podría optar por liberar las flotas el sábado y domingo, pero hay división.