El Corte Inglés está a punto de nombrar a su tercer presidente en apenas un año. Tras la salida de Dimas Gimeno el 14 de junio del año pasado, la empresa prepara ahora el relevo al frente de la compañía de Jesús Nuño de la Rosa y el nombramiento como nueva presidenta de Marta Álvarez.
Fuentes próximas al directivo aseguran que, al igual que ocurrió ya con Gimeno, Nuño de la Rosa habría mantenido diferencias con las hermanas Marta y Cristina Álvarez, que tienen el control accionarial de la compañía, ante la dificultad de ejecutar un plan que permitiera completar la digitalización del grupo, ajustar su red de tiendas, reducir plantilla y desinvertir en activos no estratégicos para afrontar el pago de la deuda, que se eleva a 3.650 millones de euros.
Su mensaje a las máximas accionistas habría sido en este sentido claro, manifestándoles que si no podía ejecutar el plan estratégico era mejor que se fuera. Marta y Cristina Álvarez le habrían recriminado entonces, sin embargo, que no hubiera podido cumplir con los objetivos previstos.
En este sentido, le habrían reprochado que el grupo le pidió lograr el investment grade en la emisión de bonos en Irlanda y que no lo había conseguido o que la venta de 95 activos inmobiliarios que se encargó a PwC esperando ingresar entre 1.500 y 2.000 millones de euros habría fracasado y solo habría logrado tener una oferta por la totalidad del portfolio por 600 millones de Apollo. Y eso, al margen del plan de cierre de tiendas -se ha estudiado de forma interna la clausura de hasta una veintena de centros comerciales- que no se ha concretado y salvo la venta de dos de dimensiones reducidas en Sevilla y Cádiz y la transformación en un outlet de otro en Arroyosur (Leganés, Madrid) no se ha ido más allá.
Además, el ajuste de plantilla que se encargó a AT Kearney sigue sin concretarse y as ventas se habrían estancado, con un crecimiento en el último ejercicio de apenas un 1%. Fuentes próximas a Nuño de la Rosa explican, sin embargo, que son los grandes almacenes, que dirige como consejero delegado Victor del Pozo, los que más se están resintiendo, mientras que crecen precisamente las filiales que eran responsabilidad directa del hasta ahora presidente, como Viajes, Seguros e Informática.
Enfrentado no solo a Marta y Cristina Álvarez, sino también a Victor del Pozo, a Nuño de la Rosa no le ha quedado así más remedio que alcanzar un pacto. Con una indemnización de unos 5 millones de euros, y para evitar que se abren nuevos frentes de batalla, las herederas de El Corte Inglés habrían acordado mantenerle las condiciones de su contrato, permitiendo que siga como consejero delegado del grupo, además de ejercer la presidencia de Viajes, Seguros, Informática y Financiera.
Fuentes oficiales de El Corte Inglés aseguran, sin embargo, que "Nuño de la Rosa está encantado con volver a ocupar el puesto como consejero delegado" y que considera "idóneo el nombramiento como presidenta de Marta Álvarez", que puede abrir otra etapa de crecimiento en la compañía, insistiendo además en que se han cumplido todos los objetivos previstos.
¿Quién controla la compañía?
Las hermanas Álvarez controlan de forma directa el 22,18% de El Corte Inglés a través de su sociedad patrimonial, Cartera de Valores Iasa, pero tienen también bajo su mando a la Fundación Ramón Areces, que es la primera accionista con el 37,39% de la compañía, con lo que no tendrán ningún problema en sacar adelante su plan. Los otros grandes socios son el inversor catarí Al Thani, que se abstuvo ya en el cese de Gimeno, pero cuya posición en el próximo consejo de administración que debe decidir el relevo es todavía una incógnita, y Corporación Ceslar, con un 9% y Cartera Mancor, con otro 7%, que apoyarían a la hija del expresidente Isidoro Álvarez, fallecido en 2014.
"Un cambio de liderazgo"
El Corte Inglés mantiene ahora que cuando se decidió el nombramiento de Nuño de la Rosa hace un año, ya estaba pactada su salida cumplido el primer ejercicio de mandato. En su nombramiento en 2018 se aseguró que "el órgano de gobierno de la compañía ha considerado necesario un cambio de liderazgo para afrontar los retos de futuro e impulsar una nueva etapa de crecimiento".
Según decía, "Nuño de la Rosa cuenta con una amplia y dilatada experiencia en el mundo de la empresa y de las finanzas, lo que permitirá encarar los nuevos desafíos del grupo". Pero las cosas han cambiado y la situación ahora es otra. Y todo indica que el hasta ahora presidente, antes o después, acabará abandonando la empresa.