El viceprimer ministro y responsable de Consumo de Bélgica, Kris Peeters, avisó ayer a la aerolínea de bajo coste Ryanair de que no puede imponer "unilateralmente" una subida del precio de los billetes de avión ya adquiridos con la nueva tasa para maletas de mano.
"Ryanair no puede aumentar de manera unilateralmente el precio de un vuelo ya reservado, porque sería una ruptura de contrato", ha declarado Peeters en un comunicado difundido a los medios.
En una carta a Michaerl O'Leary, el ministro belga insta al líder de Ryanair a no imponer la nueva política de maletas en cabina que la compañía prevé empezar a aplicar a partir del 1 de noviembre a aquellos usuarios que hayan adquirido sus billetes antes del 1 de septiembre. Los servicios que dirige Peeters han abierto una investigación sobre el caso y han presentado conclusiones "muy claras" sobre la irregularidad de aplicar la sobretasa de entre 6 y 8 euros por el bulto de mano a quienes compraran sus vuelos antes de septiembre.
Por otro lado, la reunión de mediación prevista para hoy entre los sindicatos de tripulantes de cabina (TCP) USO y Sitcpla y Ryanair ha quedado suspendida tras la dimisión ayer de la directora general de Trabajo, Concepción Pascual.
Este miércoles sindicatos de TCP y Ryanair tenían previsto retomar las negociaciones en el marco del proceso de mediación en la Dirección General de Trabajo en el conflicto que mantienen ambas partes, y que quedaron aplazadas tras dos jornadas en agosto que finalizaron sin acuerdos. "De momento, no hay alternativa ni en cuanto a nueva fecha de reunión ni de la persona que seguirá al frente de la mediación", explica el responsable de Vuelo de USO Sector Aéreo, Ernesto Iglesias, en un comunicado. El sindicato ha confirmado que pese a que este encuentro era clave se mantiene la reunión en Roma el día 7 entre los sindicatos españoles, el portugués y los belgas.
