Liberbank avanza en su transformación comercial con una novedosa herramienta. La entidad ha reiventado los cajeros automáticos con la ayuda de la empresa tecnológica Arppa Logic. Hoy tiene previsto iniciar la operativa de unas máquinas autoservicio que incorporan asesores, con el fin de que los clientes puedan realizar sus consultas y hasta 120 transacciones.
La intención del banco es adecuar los avances digitales a las necesidades de los usuarios, que en muchos casos necesitan acudir a una sucursal para llevar a cabo sus operaciones financieras, principalmente personas de avanzada edad.
Por ahora ha instalado 30 máquinas de este tipo en las zonas de autoservicio, para llevar a cabo una prueba piloto en las próximas semanas. Una vez finalice este periodo, extenderá este sistema a más de 150 oficinas.
La máquina, además, amplía la atención a los clientes, ya que estará disponible de ocho de la mañana a ocho de la tarde de lunes a viernes y los sábados hasta el mediodía.
Comunicación en directo
Esta especie de cajero automático avanzado requiere tan sólo una identificación con el DNI. La comunicación con los gestores se establece mediante vídeo en directo y facilita todas las funcionalidades de un dispensador de efectivo y de la banca por internet o por móvil. El aparato cuenta con impresora, escáner y captura digital para que se puedan materializar todo tipo de operaciones, a excepción de aquellas que necesitan la presencia física de un comercial, como la contratación de una hipoteca o un fondo de inversión, entre otros.
La máquina puede dar servicio a los no clientes de Liberbank, ya que permite el pago de facturas o impuestos con compañías y administraciones que tienen acuerdos con el banco.
Este desarrollo, en el que la entidad y Arppa Logic llevan trabajando más de un año, forma parte del proyecto puesto en macha para incrementar los procesos tecnológicos y hacer frente a las nuevas formas de operar en banca. Como el resto del sector, Liberbank está impulsando la digitalización con el fin de adaptarse a los tiempos y ahorrar costes operativos. Los menores gastos son una de las principales palancas con las que cuenta el sistema para intentar compensar la caída de ingresos por el desplome de los tipos de interés.
En los últimos años, las entidades están desarrollando aplicaciones y sistemas para llegar a todo tipo de clientes y despejar la carga de trabajo en las oficinas para labores de asesoramiento y contratación de producto de valor añadido.
Este objetivo está provocando, a la par, una segmentación de la red. En el caso de Liberbank, su plan diseña tipologías de sucursales: las tradicionales, las urbanas, que son más pequeñas y no tienen caja y las de autoservicio.