
Las acciones de Royal Bank of Scotland (RBS) caen con fuerza en la bolsa de Londres después de anunciar su octava pérdida anual en 2015. En concreto, la entidad se dejó cerca de 2.000 millones de libras (más de 2.500 millones de euros) en el conjunto del año pasado tras las pérdidas de 3.470 millones de 2014. Tras estas cifras, el banco ha indicado que probablemente no volverá a pagar dividendo antes de 2017.
El banco, rescatado por el Estado hace más de seis años, explicó que estas pérdidas respondieron a los costes para hacer frente a las compensación por la venta indebida de un seguro de protección de pagos (PPI, por sus siglas en inglés).
Los ingresos totales del RBS fueron en 2015 de 12.923 millones de libras (16.799 millones de euros), una caída del 14,6% frente al año anterior. Asimismo las pérdidas operativas antes de impuestos alcanzaron los 2.703 millones de libras (3.513 millones de euros), frente a los beneficios operativos brutos de 2.643 millones de libras (3.435 millones de euros) obtenidos el año anterior.
Los depósitos de los clientes ascendieron en 2015 hasta 343.186 millones de libras (446.141 millones de euros). El Tier 1, recursos propios básicos, fue del 15,5 %, mientras que el ratio préstamo frente a depósitos fue del 89%.
Afectado por los bajos tipos de interés
El RBS señaló que los resultados responden también a los menores ingresos por tipos de intereses bajos, en el 0,5%. "Los bajos tipos de interés están afectando a los bancos y está bien claro que los tipos permanecerán bajos por mucho tiempo más", señaló el consejero delegado del RBS, Ross McEwan.
"Reino Unido y la República de Irlanda tienen economías bastante fuertes. pero estamos viendo una desaceleración en varias economías en todo el mundo", añadió. "Aún tenemos mucho trabajo por delante en cuanto a la base de costes de nuestro negocio", subrayó McEwan.
El directivo resaltó que la decisión del Gobierno británico de empezar el proceso para deshacerse de su participación mayoritaria en el RBS en 2015 es un "paso adelante significativo" y "pone de manifiesto los progresos que hemos hecho en los últimos dos años".