China llega a la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26) de Glasgow batiendo récords de contaminación -en 2019, el país asiático emitió más gases contaminantes que todos los países desarrollados juntos- y un nuevo plan para revertir esta situación. Un plan que viene a actualizar unos objetivos para reducir las emisiones de CO2 que muchos calificaron de insuficientes, pero que han servido para impulsar la industria de las energías renovables en China, así como para aumentar en más de un 20% la riqueza de los empresarios ecológicos del país.
Este año, un total de 60 ejecutivos chinos relacionados con el desarrollo de las energías renovables y los coches eléctricos se han colado en la Lista Anual de Ricos de Hurun, que incluye a 2.918 personas con un total de 5,3 billones de dólares de riqueza. Según el ranking, de las diez personas que han experimentado un mayor incremento de su riqueza, ocho forman parte de esa revolución verde.
El líder de esta tendencia es Zeng Yuqun, fundador y presidente del fabricante de baterías Contemporary Amperex Technology (CATL). Zeng es la tercera persona más rica de China tras casi triplicar su fortuna, que ya roza los 50.000 millones de dólares. En agosto, el principal fabricante de baterías de China hizo público su plan para vender 9.000 millones de dólares en acciones con los que financiar el aumento de su capacidad de producción. La compañía ha visto cómo sus acciones subían más de un 150% este año gracias al crecimiento de las ventas y la extensión del acuerdo con Tesla.
En el puesto número 20 se encuentra Wang Chuanfu, fundador y director general del fabricante de vehículos eléctricos BYD, cuya riqueza también se ha triplicado este año hasta alcanzar los 22.000 millones de dólares. BYD es el tercer fabricante de coches enchufables de China y el cuarto de baterías a nivel mundial. El precio de sus acciones ha subido casi un 30% en lo que va de año y, además, cuenta con el apoyo de Berkshire Hathaway desde 2008.
El ascenso de los empresarios ecológicos también se ha visto motivado por la situación actual que vive el sector inmobiliario en China. Por primera vez desde 1999, no hay ningún multimillonario del sector inmobiliario entre los 10 primeros puestos de la lista. Significativo es el caso de Hui Ka Yan, presidente del gigante inmobiliario Evergrande, que ha pasado de ocupar el quinto puesto al 70º, después de desplomarse su riqueza un 68,9%, hasta los 11.300 millones de dólares.
Por su parte, la fortuna de los gigantes de internet se ha visto aplastada por las medidas del gobierno contra las prácticas de datos y el comportamiento monopolístico del sector. El año pasado, Jack Ma, fundador de Alibaba Group Holding, encabezaba la lista y ahora ocupa el quinto puesto tras perder un 36% de su riqueza.
Cabe destacar que el primer puesto de la lista lo ocupa Zhong Shanshan, fundador de la empresa de agua embotellada en plástico Nongfu Spring, con un patrimonio neto de 60.500 millones de dólares. Un hecho que siembra dudas sobre la "revolución verde" del gobierno chino y su compromiso de alcanzar la neutralidad de carbono en 2060.