Lantania prevé más que duplicar sus ingresos en 2021, hasta superar los 200 millones de euros, y prácticamente doblar el resultado bruto de explotación (ebitda), hasta el entorno de los 20 millones de euros. Un crecimiento sustentado en la positiva evolución de la contratación y la compra de empresas acometida que han impulsado su cartera, con un nivel estimado para cierre del año por encima de los 500 millones de euros, frente a los 350 millones del último ejercicio. La firma ultima ya un nuevo plan estratégico con el horizonte hasta 2026 -el actual culmina en 2022-.
Lantania, el grupo de infraestructuras fundado hace tres años con la compra del negocio de construcción, agua y energía a Isolux, ha sorteado la crisis derivada de la pandemia con incrementos significativos de sus resultados operativos. En 2020, año en el que el Covid-19 impactó en la demanda y la productividad del sector, la compañía registró un crecimiento de los ingresos próximo al 20%, hasta los 117 millones de euros, y mantuvo estable su ebitda en 10,1 millones.
"A pesar de la coyuntura seguimos realizando operaciones corporativas, consolidando la compañía y creciendo"
"Fue un año positivo a pesar del Covid; si no lo hubiera habido habríamos tenido más de 20 millones de ingresos adicionales", asegura Federico Ávila, presidente de Lantania. "Ha sido una prueba de la capacidad de resistencia de la compañía de la que hemos salido con matrícula de honor", presume.
Además de la positiva marcha operativa, Lantania también consiguió concretar tres adquisiciones: las empresas de agua Soil Tratamiento de Aguas Industriales y Deisa IWS y Typsa (Traviesas y Prefabricados de Aragón). Con ello, la empresa "complementa la actividad en dos sectores clave que son el agua y el ferroviario", subraya Ávila. "A pesar de la coyuntura seguimos realizando operaciones corporativas, consolidando la compañía y creciendo", abunda. No en vano, para Lantania los seis primeros meses del año "están siendo mucho mejor de lo esperado". En el primer semestre de 2020 "no llegamos a 50 millonse de ingresos y ahora hemos superado los 100 millones".
A pesar del hundimiento de la licitación pública, Lantania cerró 2020 con una contratación de 150 millones de euros, hasta situar su cartera en 350 millones. Un nivel que ya en los seis primeros meses del año, impulsada también por la compra de empresas, se eleva hasta los 450 millones. Y para final de año, Ávila proyecta que la cifra supere los 500 millones, equivalentes a más de dos años de trabajos.
Lantania mantiene el radar activado para nuevas compras. No en vano, espera cerrar este mismo año una operación
Por negocios, la constructora obtiene el 60% de sus ingresos de infraestructuras y edificación, un 19% de energía, un 10% de conservación y servicios y un 10% de agua. La hoja de ruta que la compañía está ultimando discurre por incrementar en los próximos años el peso de energía y, sobre todo, agua. Sobre este último, el presidente de Lantania pone en valor las dos adquisiciones ejecutadas el pasado ejercicio para conseguirlo.
Lantania mantiene el radar activado para nuevas compras. No en vano, espera cerrar este mismo año una operación. En este momento "tenemos una bastante avanzada" en el ámbito civil y ferroviario en España. También busca oportunidades en el exterior en segmentos que "nos complementen", señala.
Precisamente, la estrategia de Lantania también pondrá el foco en el crecimiento internacional. Con la adquisición del negocio de agua de Soil irrumpió en Colombia y también ha ganado sus primeros contratos ferroviarios en Bulgaria. En Latinoamérica mira Perú y Chile, en Estados Unidos trabaja por entrar en Texas y California en ferroviario y energía y en Europa pretende Suecia y los países bálticos.
Tiene 250 MW eólicos en Galicia, de los que 50 MW ya tiene los puntos de interconexión
En España uno de sus objetivos es desarrollar energías renovables. Tiene 250 MW eólicos en Galicia, de los que 50 MW ya tiene los puntos de interconexión, y una cartera más pequeña de proyectos solares en Madrid y Castilla-La Mancha.
Ávila remarca también la posición financiera de Lantania para afrontar su crecimiento, con una deuda de 26 millones de euros, pero con una cifra de tesorería superior. Con todo, en un entorno en el que la concentración bancaria limita la financiación, la firma analiza distintas opciones para reforzar su capacidad y no descarta incluso "la entrada de un socio". El fondo Stator es el primer accionista con el 50,9% y los directivos tienen el 46,1%.