
El Gobierno ha aislado en prácticamente todo a la sanidad privada durante la pandemia. Sin embargo, hay un nicho que las aseguradoras adscritas al modelo Muface conservarán: poner la vacuna contra el coronavirus a los funcionarios adscritos a este sistema.
Fuentes del sector aseguraron a este medio que la decisión está tomada desde el Ministerio de Sanidad y que cuando llegue el momento de vacunar a los grupos de población con menor riesgo, participarán en la campaña.
Además, recuerdan que tienen experiencia de sobra en campañas de vacunación como han demostrado cada año en el proceso para inmunizar contra la gripe. De hecho, durante octubre y noviembre de 2020 participaron en una de las campañas más ambiciosas contra la gripe, donde, a expensas de confirmación por los datos oficiales, se ha rondado el 75% de personas vacunadas entre los grupos de riesgos (personas mayores y sanitarios).
Por otro lado, el ministro Salvador Illa confirmó al sector del aseguramiento la continuidad del modelo Muface tal y como existe en la actualidad. Las dudas llegaron desde dos frentes. Por un lado, desde Podemos han reiterado su intención de acabar con este sistema mediante la supresión paulatina de nuevos afiliados. Además, un borrador de un documento del Ministerio de Sanidad, filtrado en verano de 2020, también cuestionaba la pertinencia de seguir apostando por el modelo. Ante las dudas, el sector se reunió con el ministro y este les aseguró que la supresión del modelo no está en la agenda.
Cabe recordar que este sistema de aseguramiento es voluntario para cualquier funcionario público. El Estado paga una cantidad por su atención sanitaria a cambio de liberar al sistema público de salud. Pero además, según cálculos del sector, cada funcionario adscrito al modelo ahorra casi 500 euros al año de media (de unos 800 a 1.300 euros).