
Telefónica espera alcanzar el autoabastecimiento energético a lo largo del próximo años, todo ello procedente de recursos renovables producido en las 70 plantas de generación que tendrá operativas a lo largo de 2021. Cuando todas estas instalaciones estén en funcionamiento, la filial brasileña de Telefónica será capaz de producir unos 670.000 MWh/año de energía, recursos suficientes como para abastecer todo el consumo de una ciudad de hasta 300.000 habitantes.
Por lo pronto, la compañía de telecomunicaciones ya dispone de 15 instalaciones eléctricas al servicio de Vivo (marca comercial de Telefónica en aquel país), entre las que destaca la primera planta de energía solar situada en el Distrito Federal de Brasil, bajo el modelo de generación distribuida.
En los próximos meses se sumarán nuevas plantas que operarán con fuentes de origen solar, hídrica o biogás. De esa manera, Vivo es la primera empresa del sector carbono neutral en Brasil y mantiene un consumo de energía 100% renovable desde 2018, una iniciativa que permitió a la compañía reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero en un 50% en 2019.
Athon Energia
Las instalaciones recién inauguradas de Telefónica en el Distrito Federal de Brasil están construidas y operadas por Athon Energia. En concreto, la planta está situada en la Región del Café Sem Troco, núcleo rural de Paranoá, en una superficie equivalente a 15.000 metros cuadrados y tiene una capacidad instalada de 4.824 MWp dedicados a la operación.
Según explica Telefónica a través de un comunicado, "se trata de un paso importante para Vivo, que avanza en su modelo de generación distribuida de energía".
Meses atrás, Vivo ya desveló su intención de producir su propia energía, en respuesta a su política de adopción de las mejores prácticas en el uso de las energías renovables. Para ello, la teleco optó por un modelo de generación distribuida (GD, también conocida como energía descentralizada, cercana al consumidor), con el uso de fuentes renovables de origen solar (61%), hídrica (30%) y biogás (9%).
Con vistas al próximo año, y ante el reto de poner en funcionamiento 70 plantas, el operador confía en atender más del 80% de su consumo en baja tensión. Ese objetivo equivale a atender a más de 28.000 unidades de la empresa, como tiendas, torres, antenas, equipos de telecomunicaciones y oficinas. "Además de contribuir al medio ambiente porque es renovable y de bajo impacto, la medida debería generar un importante ahorro anual en el gasto energético". Las mismas fuentes apuntan que "la obtención de energía a través de la generación distribuida en pequeñas centrales eléctricas cerca de los puntos de consumo también contribuye a minimizar las pérdidas en el sistema de distribución, además de reducir las emisiones de CO2 y evitar los impactos de las grandes empresas en el medio ambiente y la comunidad".
La primera planta de origen solar fue inaugurada en junio de este año, en la localidad de Campinas, instalada en una superficie de 80.000 metros cuadrados. Construida en asociación con TMW Energy, la planta tiene una capacidad de 4,77 MW y se instala en el área de concesión de CPFL Paulista.