Telefónica ha anunciado tres grandes novedades: el acuerdo de fusión con Virgin Media (propiedad de Liberty Global) para unir sus negocios en igualdad de condiciones en el Reino Unido y liderar el mercado británico de servicios fijos y móviles; la reducción del beneficio del 56,2% en el primer trimestre del año con una ganancia de 406 millones de euros; y la oferta del pago canjeado en acciones del segundo tramo del dividendo de 2019 y del primero de 2020 -que entre ambos suman 40 céntimos por título-. Ademas, el grupo reconoce que la crisis de la COVID-19 ha tenido un impacto limitado en las cuentas de un grupo.
Entre los tres referidos anuncios, el más sorprendente para los accionistas promete ser la opción voluntaria de retribución mediante la fórmula de script-dividend. Este modelo de remuneración en 'papelitos' -ya utilizado por la 'teleco' hace cinco años-, dotará de flexibilidad a la tesorería del grupo y aliviará la presión de la deuda. Sin embargo, a efectos del inversor que decida cobrar en efectivo, la propuesta implicará una dilución implícita del valor de los títulos al ir emparejada de una ampliación de capital, con el consecuente incremento del número de acciones en circulación.
En concreto, el grupo propondrá a la Junta de Accionistas del próximo 12 de junio que tanto el pago del segundo tramo del dividendo de 2019 (0,20 euros, que se abonará en junio 2020) como el primer tramo del dividendo de 2020 (de 0,20 euros, que se liquidará en diciembre 2020) se haga mediante la modalidad de dividendo flexible voluntario ('voluntary scrip dividend'). Sin embargo, el segundo tramo del dividendo de 2020 (0,20 euros) se pagará en efectivo en junio 2021. Cada pago de 20 céntimos de dividendo en script diluye hasta el 4,7% al accionista del operador, que es el equivalente de los títulos en circulación si todos los inversores decidiesen recibir las acciones a los precios actuales.
Ante la incertidumbre global de la pandemia del coronavirus, y en sintonía con la actuación de otras grandes corporaciones, el grupo ha decidido retirar sus previsiones de ingresos y rentabilidad. En adelante, la 'teleco' espera un crecimiento orgánico del oibda para 2020 entre ligeramente negativo y estable, mientras que reitera los objetivos financieros de 2022, con un crecimiento de las ventas y mejora de dos puntos porcentuales del ratio oibda sobre ingresos. Entre otras magnitudes destacadas, la multinacional impulsa la generación de caja libre un 20,6% en el primer trimestre, hasta 5.912 millones de euros, lo que representa el nivel más alto de los siete últimos años
Pese a que el coronavirus ha reducido el negocio de roaming, debido a los casi nulos desplazamientos de sus clientes a otros países durante la segunda quincena de marzo, así como a la caída a plomo de las ventas de terminales en las dos o tres últimas semanas del pasado marzo, periodo en el que la población española estuvo confinada en sus domicilios. Pese al bloqueo del mercado, también cerrado a las portabilidades, la contingencias del coronavirus no han erosionado especialmente las cuentas trimestrales del grupo. De hecho, el motivo principal de los menores resultados responde a la ausencia de extraordinarios que la compañía sí se anotó hace justo doce meses, cuando entonces vendió su filial de Guatemala al grupo América Móvil y se anotó unas plusvalías de 139 millones de euros. Además, en los tres primeros meses de este año también ha dejado su herida el tipo de cambio adverso en Brasil.
En esta ocasión, el mercado más animado del grupo ha sido el alemán, que han elevado sus ingresos el 3,8% respecto al primer trimestre de 2019, hasta los 1.846 millones de euros. Telefónica España ha roto su racha de ingresos trimestrales al alza con un retroceso del 1,6% respecto a 2019, con una facturación de 3.078 millones de euros. Reino Unido crece el 2,9% en ingresos, con un total de 1.739 millones de euros, mientras que los negocios en Brasil sufren el impacto de las divisas, con un frenazo del 13,6% de las ventas, hasta 2.215 millones de euros. También Telefónica Hispam ha facturado el 8,4% menos en términos interanuales (2.204 millones) y Telefónica Infra ha rebajado su negocio el 5,7% menos en términos comparables con los de Telxius de 2019 (207 millones). Por su parte, el apartado de otras sociedades y eliminaciones arrojan un negocio un 60,4% inferior, debido a la venta de filiales de Centroamérica.
Los ingresos del primer trimestre alcanzan 11.366 millones de euros, lo que supone una reducción del 5,1%(-1,3% interanual en términos orgánicos), si bien la facturación agregada de las cuatro principales regiones se mantienen estables en términos orgánicos, con crecimientos del 3,8% en Alemania y del 1,5% en Reino Unido. El oibda acumulado de los cuatro mercados estratégicos se reduce el 11,8%, afectado principalmente por la evolución de las divisas y por la referida venta de Guatemala. Desde el punto de vista orgánico, el oibda aumenta el 0,8% hasta marzo.
La deuda se sitúa en 38.223 millones de euros a cierre de marzo, lo que supone una reducción del 5,3% con respecto al mismo mes de 2019. Con los antiguos criterios de contabilidad, el recorte del apalancamiento sería del 8% menos, hasta los 37.744 millones de euros, con una reducción de cerca de 15.000 millones de euros respecto a junio de 2016. Además, la inclusión de eventos posteriores al cierre, la deuda de situaría en 37.000 millones de euros con once trimestres consecutivos de mejora del saneamiento finamiento. Sobre este aspecto, la multinacional asegura tener cubiertos los vencimientos de deuda de los próximos dos años y cuenta con una posición de liquidez de 22.500 millones, de la que 8.700 millones de euros se corresponde con los activos líquidos disponibles.
Líder del mercado británico
La confirmada 'joint venture' en el mercado británico, participada al 50% por Telefónica y Liberty Global, integrará a la red de banda ancha más rápida del Reino Unido (Virgin Media) y la mayor plataforma móvil de aquel país (O2). Según explican ambos grupos, la combinación de los activos "dará lugar a un proveedor integrado de servicios fijos y móviles más fuerte en el mercado británico, que impulsará la expansión de la red de alta velocidad de Virgin Media y el despliegue de red 5G de O2, en beneficio de clientes, empresas privadas y el sector público". Las sinergias a la vista rondarán los 6.200 millones de libras, alrededor de 7.000 millones de euros, al tiempo que Telefónica recibirá un pago compensatorio por valor de 2.865 millones de euros al cierre de la fusión, estimada para mediados de 2021, siempre sujeto a las correspondientes aprobaciones regulatorias y a otras condiciones de cierre habituales en este tipo de operaciones.
Entre otras ventajas del acuerdo en el Reino Unido, la nueva plataforma convergente de Virgin Media y O2 "pondrá al cliente en el centro de su estrategia y contará con la escala necesaria para innovar en un entorno digital cambiante, invirtiendo 10.000 millones de libras (11.454 millones de euros al cambio actual) en aquel país durante los próximos cinco años". La operación ha contado con el asesoramiento de Citi, Allen & Overy, Herbert Smith Freehills y Clifford Chance. La valoración de O2 se situó en 14.550 millones de euros y Virgin Media en 21.430 millones de euros. Entre otros detalles, O2 se unirá en la 'joint venture' libre de deuda, mientras que Virgin Media aportará alrededor de 13.000 millones de euros entre deuda neta y similares. Los dos grupos prevén recibir fondos totales netos en metálico al cierre de la operación y tras ejecutar una serie de recapitalizaciones que generarán ingresos por valor de 6.500 millones de euros para Telefónica y 1.600 millones de euros para Liberty Global.
Asimismo, la alianza de los dos gigantes se fija un objetivo de deuda neta equivalente a entre 4 y 5 veces los fondos procedentes de la generación de caja libre, con una financiación a futuro que se distribuirá a partes iguales entre Telefónica y Liberty Global.
El presidente ejecutivo de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, ha subrayado que la unión de O2 y Virgin Media, que dará origen al nuevo líder convergente del Reino Unido, "supone un punto de inflexión en el mercado británico, en un momento en que la demanda de conectividad nunca ha sido tan alta ni tan crítica". Según explica en un comunicado distribuido a la prensa, se trata de "un competidor fuerte, con una escala significativa y con fuerza financiera para invertir en infraestructuras digitales en Reino Unido, ofrecer más opciones y aportar un mayor valor a millones de consumidores, empresas y clientes del sector público".
Impacto de la COVID-19
En el comunicado de los resultados trimestrales, Álvarez-Pallete recalca la misión de su compañía, comprometida en "hacer nuestro mundo más humano, conectando la vida de las personas", valores que estos días "ha cobrado más relevancia que nunca". Así, el presidente valora que "en una situación extraordinaria y totalmente inesperada, las redes de telecomunicaciones se han convertido en esenciales". En tan exigentes condiciones, la prioridad de la 'teleco' durante esta emergencia social "han sido las personas: proteger la salud de nuestros equipos – con el 95% de la plantilla teletrabajando- y a la vez garantizar la conectividad para las personas, los negocios, las administraciones públicas y en definitiva para la sociedad".
Tras agradecer "el enorme esfuerzo y compromiso" que están haciendo todos los empleados desde sus diferentes áreas de responsabilidad, el directivo apunta que sería "difícil imaginar esta situación sin conectividad". Respecto al impacto de la crisis sanitaria y económica en su grupo, Álvarez-Pallete indica que su grupo "no es inmune a esta crisis, pero es resistente". Así, explica que "con un impacto limitado en el primer trimestre, los cuatro mercados clave se han comportado bien en un entorno único y desafiante. Los menores ingresos de partidas como roaming, prepago y de empresa se han visto parcialmente compensados por los menores costes comerciales y una menor tasa de abandono de clientes". Pese el escaso tiempo transcurrido para valorar el alcance de los efectos de la pandemia, el presidente de Telefónica señala varias palancas salvadoras: "Continuaremos gestionando la inversión y los costes, centrándonos en la estabilidad del flujo de caja operativo; Contamos con un balance sólido y con una fuerte posición de liquidez, lo que aporta resistencia y flexibilidad al modelo de negocio; y la fortaleza de nuestra compañía, que permite mantener un dividendo atractivo para nuestros accionistas, de 0,40 euros por acción". En su opinión, "esta crisis va a acelerar la digitalización de la sociedad de forma irreversible. Nos ha demostrado que no hay una vida analógica y una digital, sino que son la misma cosa. El mundo ya ha cambiado y no volverá a ser como antes. En este nuevo mundo, Telefónica tendrá un papel clave como catalizador de esa digitalización."
Negocio en España
La filial española resultó golpeada en la última quincena de marzo, especialmente por la menor venta de móviles y las bajas de los paquetes del fútbol en TV por parte de particulares, bares y restaurantes. La subsidiaria doméstica sumó los mismos accesos de hace un año, con 41,65 millones de accesos, de los que 37,87 millones corresponden a clientes finales (+0,1%) y 3,77 millones a accesos mayoristas (-2,2%). Los accesos de fibra óptica crecen un 9,1% interanual tras una ganancia neta 68.000 clientes en el trimestre y ya representan el 73% de la planta de banda ancha fija, que se reduce un 1,4% interanual tras perder 38.000 clientes en los tres primeros meses de 2020. Los clientes de contrato móvil subieron un 3,1% respecto al mismo periodo de 2019, con 51.000 nuevos usuarios netos en los tres primeros meses del año, mientras que los de televisión de pago aumentaron un 2% interanual. La cifra de clientes convergentes, entre residenciales y pymes, ascienden a 4,8 millones con repuntes entre los usuarios de fibra a velocidad premium (+17% interanual) y los asociados a clientes de O2, que se ha multiplicado por cuatro. El ingreso medio por usuario (ARPU) convergente trimestral se sitúa en 91,8 euros, un 1,1% menos interanual por el menor consumo extra de datos y la tasa de desconexión (churn) del periodo mejora hasta 1,5%, dos puntos porcentuales menos que hace un año.