El bloque de medidas aprobadas, y las no aprobadas, para los autónomos,es uno de los puntos más polémicos relacionadas con el Real Decreto-Ley que aprobó el martes el Consejo de Ministros con ayudas para paliar el efecto económico del coronavirus. Las organizaciones de autónomos se dividió en dos y, mientras que Upta y Uatea defiende las medidas como positivas, desde Ata muestran su disconformidad con la decisión de no haber amparado a todos los profesionales por cuenta ajena con la exención de las cuotas durante un par de meses, pues a día de hoy no se sabe el número de autónomos que se pueden quedar fuera de la prestación extraordinaria.
La medida aprobada por el Gobierno establece dos grupos de profesionales que cobrarán la prestación extraordinaria equivalente al 70% de la base reguladora por la que estén cotizando. En concreto, tendrán derecho, según se recoge en el Real Decreto-Ley (aprobado el pasado martes) los siguientes autónomos:
- Aquellos cuyas actividades queden suspendidas en virtud de lo exigido en el Real Decreto del estado de alarma
- Los que su facturación se vea reducida, al menos, en un 75% en relación con el promedio de facturación del semestre anterior.
La dudas entre las asociaciones es el nivel establecido del 75%, aunque fue ATA la que más beligerante se ha mostrado. Fuentes de esta organización remarcan que la remuneración media de los autónomos ronda los 1.700 euros mensuales. El Gobierno establece que para tener derecho a la prestación, tendrían que facturar por debajo de 425 euros, algo que consideran insuficiente para mantenerse.
Fuentes se la Seguridad Social aclaran, no obstante, que todos aquellos autónomos que se encuentren en estos dos grupos no tendrán problemas a la hora de cobrarla, sin importar si son personas físicas o societarias, ni por el tipo de actividad que desarrollen, aunque tengan concesiones públicas como taxistas u otros colectivos.
Durante el día de ayer se generó confusión, transmitida por algunos gestores, al considerar que los autónomos societarios u otros autónomos como los empleadores con trabajadores a cargo no podrían cobrar la prestación, pues si se daban de baja tendrían problemas para presentar un Erte para su plantilla. Sin embargo, desde la Seguridad Social matizan que este problema está solventado porque la prestación extraordinaria es una figura ex novo creada para combatir el coronavirus y no el cese de actividad tal y como está regulado hasta el momento.
Estas mismas fuentes reconocen que, aunque absolutamente todos los autónomos incluidos dentro de los dos bloques tendrán derecho a la prestación extraordinaria, en el caso de los profesionales que tributan por módulos se está viendo la fórmula para que justifiquen que su actividad ha descendido por debajo del 75% pues no están obligados a emitir facturas. No obstante, consideran un problema menor dado que tiene que llevar su contabilidad.
Exención de cuotas
En principio, aquellos trabajadores que se puedan acoger a la prestación extraordinario estarán exentos de cotizar a la Seguridad Social, pues se haría cargo de las cuotas el ente que abone la prestación. El problema reside en aquellos autónomos que se queden fuera de las ayudas.
Ninguna organización de autónomos, ni la propia Seguridad Social, se aventura a cifrar cuántos profesionales cobrarán y cuántos se quedaron fuera. En ATA han analizado cuantas actividades estarían cubiertas por el estado de alerta y, por tanto, se les aplicaría de forma directa la prestación. Sobre unas 1.300 actividades profesionales recogidas en el CNAE, tan sólo estarían amparadas unas 150, aunque la relación no es correlativa al número de profesionales.
El presidente de ATA, Lorenzo Amor, lanzó duras críticas contra el RDL y solicitó que ante la previsible caída de facturación de la gran mayoría de los autónomos, el Gobierno debería haber optado por haber exonerado de la cotización a la totalidad de los profesionales, algo más de 3 millones, durante un par de meses. De ellos, matizan, hay que descontar los que ya están exonerados gracias al cobro de la paga extraordinaria. Máxime si se tiene en cuenta que el rendimiento neto medio registrado es de 1.700 euros.
Fuentes del Gobierno destacan que el documento de peticiones firmado por las tres asociaciones que les remitieron hace días no incluía la petición de exonerar de las cuotas a la Seguridad Social a todos los autónomos, sin distinción de actividad. Fuentes de las otras asociaciones confirman que dicha petición no se pacto ni se incluyó en el documento y, además, entienden que no se puede aprobar una medida sin distinción de facturación.
Ayudas para cubrir costes
Lo que sí destacan desde Uatae y Upta, es que una de las principales medidas solicitadas al Gobierno en aquel documento se ha quedado fuera del RDL. En concreto, la solicitud de que se creen ayudas para aliviar los costes estructurales, como por ejemplo moratorias en los alquileres o el pago de hipotecas, y otros servicios como luz, agua, comunicaciones que los autónomos han de seguir abonando aunque se haya caído su actividad totalmente o de forma muy considerable.