Hace tiempo que las oficinas bancarias de cristales blindados y espacios diáfanos comenzaron a transformarse por lugares con WiFi, café y un trato cercano con el cliente. Adaptándose a los nuevos tiempos, el sector financiero ha evolucionado por completo y con ello, también los perfiles que se demandan entre sus trabajadores. Así lo refleja un informe de Randstad Professional donde se destaca, entre otros aspectos, las nuevas carreras que tienen cabida en la banca o los puestos de trabajo que han aparecido durante los últimos años.
Estudios de ciencias, matemáticas o ingenierías ya no son cotos vetados dentro del sector financiero. Es más, cada vez son más las empresas que miran hacia estos ambientes para crear nuevos perfiles entre sus trabajadores, donde destacan los analistas de riesgos, de banca privada, los 'controllers' financieros, de costes o incluso expertos jurídicos.
Una amplia rama de rasgos que ya son habituales en la banca y que ejemplifican la adaptación de ésta a las nuevas tecnologías y al incremento de las regulaciones normativas del sector. Características que han provocado que los empleos destinados a la digitalización o al correcto cumplimiento jurídico de las empresas estén entre los más demandados según Randstad.
También los orientados hacia conocimientos de Big Data, capaces de manejar grandes cantidades de información, y que sirvan bien suministrar al clientes soluciones financieras (analista de banca privada), bien para detectar riesgos y lograr minimizarlos (analista de riesgos).
Por último, las entidades están impulsando los perfiles de directores de banca con una amplia experiencia en el sector. Unos roles aptos para localizar y sacar provecho de las oportunidades del mercado, a la vez que gestionan equipos que sean flexibles y de un aprendizaje continuo.
