
Caser recibirá en el mes de octubre las ofertas vinculantes para su operación de venta. La compañía aseguradora aún no ha fijado una fecha concreta para la recepción de las propuestas de los cuatro candidatos a hacerse con el control de la compañía, pero el objetivo, según fuentes conocedoras del proceso, es que sea en unos quince días con el fin de que a principios de noviembre se adopte una decisión y la operación se cierre antes de finales de este año.
La empresa ya tiene sobre la mesa las ofertas preliminares de Helvetia, Aegas (antigua Fortis), Nationale Nederlanden y Santalucía, que valoran el 100% de las acciones en el entorno de los 1.000 millones. Ahora, estos cuatro jugadores están analizarando con todo detalle las cuentas y el balance para afinar estas propuestas que, a priori, convencen a todos los socios, aunque no todos tienen intención de vender su participación.
A priori ni Liberbank, ni Ibercaja ni Unicaja están dispuestos a ceder su 36% del capital, por lo que el comprador se hará con un porcentaje de entre el 50 y el 64% del capital. Estas tres entidades consideran estratégica su posición en Caser por los acuerdos de distribución de pólizas, por lo que han exigido que el nuevo propietario mayoritario aporte estabilidad, lo que ha provocado que se hayan rechazado las candidaturas de los fondos de inversión que habían mostrado interés.
Entre los accionistas que pretenden vender para cosechar plusvalías y porque no encaja en su modelo tras establecer alianzas con otras aseguradoras, destacan Bankia, Abanca, CaixaBank y la francesa Covéa, además de BBVA y Sabadell. Todos estas entidades poseen un 58,52% del capital.
1.500 millones es el volumen de primas que generó Caser en 2018, según sus propias cuentas. Dos tercios correspondieron a pólizas generales
Covéa, que controla el 20%, rechazó en la pasada primavera, antes de que comenzara el sondeo del mercado para testar el apetito, ejercer el derecho preferente de adquisición y finalmente esta predispuesto a deshacerse de su posición.
87 millones es el beneficio que obtuvo Caser el año pasado, después de que experimentara un crecimiento del 31,6% con respecto a 2017
Algunos de los accionistas han exigido que entre los posibles compradores no se situara Mapfre, que fue una de las primeras que lanzó sus muestras de interés a través de una carta al consejo de administración, que nunca fue respondida, según la versión de esta última.
Según fuentes cercanas a Caser la entidad que más reticencias habría mostrado a una desinversión en favor del grupo que preside Antonio Huertas ha sido CaixaBank, con el objetivo de mantenerse como líder del mercado asegurador en España. La suma de Mapfre con Caser elevaría la cuota de la primera al entorno del 14%, tras sumar un 2,5%, mientras que VidaCaixa se quedaría con el 12%.
El capital de Caser está repartido de la siguiente manera: Covéa cuenta con un 20%; Bankia, con un 15%; Ibercaja; con un 13,95%; Liberbank, con un 12,22%; Abanca, con un 9,99%; Unicaja, con un 9,99%; Hiscan, con un 6%; CaixaBank, con un 5,48% la propia Caser, con un 3,64%; y otras entidades y sociedades vinculadas a las cajas, con el restante 3,65%.