El consejero delegado de Bankia, José Sevilla, ha cuestionado hoy la capacidad del BCE, con sus medidas anunciadas la semana pasada, para recuperar la economía, como es su objetivo, en el 'II Foro de Banca organizado' por elEconomista y patrocinado por el Grupo Oesía. El número dos de Bankia ha señalada en este sentido que, las medidas han generado al mercado un "aluvión" de criticas veladas y escepticismo para incentivar el crecimiento". "La cuestión es si tiene capacidad para ayudar al crecimiento", ha indicado Sevilla en el acto, después de señalar que esto es lo relevante, más allá del impacto que puedan tener en las cuentas de los bancos.
El consejero delegado del grupo ha asegurado que en este contexto de tipos negativos, más de lo previsto hace uno o dos años, las entidades tendrán que cambiar su modelo de negocio para poder mejorar sus márgenes y su rentabilidad. Bankia es una de las entidades más afectadas por una bajada de los tipos, aunque las medidas del BCE han quitado cierta presión al sector, porque se puede ahorrar en España en 450 millones por el sistema escalonado para no penalizarlo por el dinero que deposita en su ventanilla.
El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, también ha cuestionado durante su intervención en la mesa redonda la validez de las medidas monetarias del Banco Central Europeo (BCE) para evitar una recesión y mejorar la economía. A su juicio, estas medidas benefician a las personas y a los países endeudados a corto plazo, pero se pregunta si a futuro es positivo ante la dificultad de captar depósitos. No obstante, ha recordado que la banca lleva varios años reorganizando su modelo de negocio, de modo que su rentabilidad ya no depende solo del ahorro de los clientes y de las hipotecas. "Hace mucho tiempo que hacemos una provisión universal de servicios financieros, que son negocios que pueden permitir que el conjunto de la entidad sea rentable", ha dicho.
Por su parte, José Antonio Álvarez, consejero delegado del Banco Santander, ha apuntado que las medidas del BCE están desincentivando el ahorro de los ciudadanos y empresas, puesto que no les ofrece ninguna rentabilidad a su dinero. "El ahorrador sale perjudicado frente al que toma préstamos", ha señalado. No obstante, ha negado la posibilidad de que el sector financiero acabe trasladando el coste de los depósitos a los clientes minoristas. Asimismo, ha dicho que el BCE ha dejado algo claro en su último mensaje: que la subida de tipos va a tardar, pero que no habrá más recortes en la facilidad de depósitos.
Jaume Guardiola, consejero delegado del Banco Sabadell, también ha mostrado su escepticismo a que la la banca vaya a cobrar a los clientes minoristas por sus depósitos. "Eso no va a pasar", ha dicho. No obstante, ha señalado que el sector se queja mucho de las políticas del BCE para tratar de incentivar la economía cuando beneficia a países como España que tiene mucha reclamación de deuda.
Necesidad urgente de Gobierno
Los cuatro consejeros delegados han coincidido en señalar la necesidad de que se forme Gobierno rápido tras la convocatoria de nuevas elecciones del 10 de noviembre. El consejero delegado de Bankia, José Sevilla, ha asegurado que espera que tras las elecciones salga un Gobierno "estable" y "con capacidad de gobernar y hacer las reformas que España necesita". "Eso es lo que queremos todos y esperemos que se consiga en un plazo lo más corto posible", ha matizado.
Por su parte, el consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, ha reconocido que la incertidumbre no es buena, pero el sector financiero ya lleva un "cierto tiempo" sometido a bastante incertidumbre. "Lo mejor es que se acabe", ha señalado. Gortázar ha lamentado que la incertidumbre "es algo con lo que tenemos que contar, no nos queda mas remedio". Así, ha deseado que sea posible formar gobierno cuanto antes tras el próximo 10 de noviembre.