Tan sólo 24 horas después de que Vox supeditara su posible apoyo a PP y Ciudadanos en Andalucía a la retirada de las ayudas contra la violencia de género, la formación liderada por Santiago Abascal ha elevado el tono y ha redoblado el pulso amenazando con no dar sus votos en la investidura si no se constituye una mesa de negociación en la que se atiendan sus demandas.
Ha sido el secretario general de Vox, Javier Ortega Smith, quien este jueves en una entrevista en RNE ha exigido desde la formación de Abascal que se negocie cara a cara: "Si quieren negociar se tienen que sentar a una mesa y debatir y poder plantear otras cuestiones. Han decidido imponer a Vox lo que consideran que es bueno para Andalucía".
Al mismo tiempo, ha señalado a 'populares' y 'naranjas' por igual: "Vienen a poner encima de la mesa un documento que sospechamos que ha sido pactado, en gran medida, entre Ciudadados y el PSOE, con Podemos por detrás. Luego el PP lo ha aceptado, como tantas políticas que ha venido haciendo, que son de cobardía absoluta y de sumisión a la izquierda".
HILO VA:
— Santiago Abascal (@Santi_ABASCAL) 3 de enero de 2019
Cs y PP han cerrado una pacto para repartirse los sillones de la Junta de Andalucía. Lo que ocurre es que no tienen mayoría suficiente para sostener ese pacto. Cualquier persona sensata entiende que, para conseguir los votos que les faltan, tendrán que negociar con otros
Poco después, ha sido el propio Abascal el que, a través de un hilo de Twitter en su cuenta personal, ha deslizado que su partido no votará la investidura de Juanma Moreno si no se negocia antes: "¿Qué partido va a votar el programa de otros partidos que le desprecian, y además traicionando a sus votantes? Vox, desde luego, no".
"Desde la noche electoral Vox ha repetido que no será obstáculo para el cambio en Andalucía. Pero que tampoco será alfombra para la continuidad de las mismas políticas con otras siglas, sean las de PSOE-Podemos o las de PP-Cs", ha sentenciado también el líder de la formación de ultraderecha.
De la misma manera, sobre la polémica generada en torno al rechazo por parte de Vox del acuerdo entre PP y Ciudadanos en materia de género, Abascal ha arremetido contra Ciudadanos: "Vox propone sustituir las leyes de ideología de género, que no protegen a la mujer, y persiguen al hombre solo por serlo, por una ley contra la violencia intrafamiliar. Es decir, lo mismo que proponía la veleta naranja no hace mucho".
Por último, Abascal ha reclamado que se tengan en cuenta otras medidas incluidas en su programa: "Reducción fiscal, desmontaje de la administración paralela, fuera leyes ideológicas y apoyo al mundo rural y sus modos de vida".
El PP se aviene a escuchar a Vox, pero Ciudadanos avisa de que el pacto estará roto si se cambia
En un primer momento, el secretario general del PP, Teodoro García Egea, se ha mostrado dispuesto a transigir con Vox tras la exigencia del partido de Abascal. García Egea ha asegurado en una entrevista en RNE que el PP conversará con Vox, "como ha negociado en otras regiones con otros partidos", aunque ha querido poner el foco en que el cambio en Andalucía pasa por el acuerdo alcanzado con Ciudadanos.
Después, el líder del PP, Pablo Casado, ha dado una de cal y otra de arena a Vox. Por un lado, ha pedido a los de Abascal que saquen la violencia de género del debate partidista y que no "politicen" con este asunto porque todos deben ir "juntos" para combatir esta "terrible lacra social". Por el otro, ha pedido al resto de partidos que no impongan un "cordón sanitario" contra Vox.
Sin embargo, desde Ciudadanos, su secretario general, José Manuel Villegas, ha asegurado que "no se va a mover nada" del acuerdo alcanzado entre su formación y el PP en Andalucía tras el aviso de Vox. "Es ruido", ha subrayado en una entrevista en Onda Cero.
De hecho, en unas declaraciones posteriores, ha avisado al PP de que el acuerdo programático cerrado estará roto si acaba aceptando cambiar su contenido para atender las demandas que Vox ha puesto encima de la mesa. Esta advertencia llega el mismo día en que ambos partidos acometen la composición final del nuevo Ejecutivo andaluz.
Con todo, ha afirmado que no existen conversaciones con el PP para alterar ese acuerdo programático para, tal y como defiende Vox, modificar lo relativo a las ayudas a la violencia de género. "No hemos hablado de este tema, hay contactos para hablar de la conformación de gobierno, estamos centrados en esto", ha agregado sobre sus conversaciones con el PP.
A su vez, el líder de Ciudadanos en Andalucía, Juan Marín, ha asegurado al respecto que los dirigentes de Vox aún no saben "cómo funcionan las instituciones" y cómo se modifican las leyes, y por eso condicionan la formación de un Gobierno regional a la eliminación de ciertas medidas contra la violencia de género.
En una entrevista en Antena 3 Marín ha recordado que esas medidas fueron aprobadas por la unanimidad del Parlamento de Andalucía, en su compromiso de proteger a todas las víctimas de esa "lacra", que ni el Estado de Derecho, la Constitución, el Estatuto de autonomía ni las leyes "pueden permitir".