
En diciembre de 2015, las hipotecas en España eran las segundas más baratas de la UE. Han bastado 9 meses para que la situación se haya revertido. Ahora el diferencial de los créditos para la compra de viviendas es el tercero más alto del continente (2,03%). El fomento de las hipotecas a tipo fijo, que ya suponen el 54% del total, está detrás del encarecimiento.
Lejos de lo que se podría pensar, la tendencia al alza en el precio de las hipotecarse se fortalecerá en los próximos meses. Subir los diferenciales es una de las armas que tiene el sector bancario para protegerse de los impactos de un euribor negativo y de la disminución del negocio, que hace que la rentabilidad sobre recursos propios esté muy por debajo del coste del capital.