Editoriales

Los estímulos que la Eurozona necesita

El presidente del BCE, Mario Draghi.

El presidente del BCE, Mario Draghi, confirmó ayer lo que hasta ahora era sólo una expectativa de los analistas. Al término de la reunión del Consejo de Gobierno, Draghi aseguró que anunciará nuevos estímulos en diciembre. El banquero central no concretó las medidas, pero los expertos confían en que se tratará de una ampliación del programa de flexibilización cuantitativa (QE, según sus siglas en inglés) actualmente en marcha. También los mercados apuestan por esa opción. Lo demostraron las bolsas europeas con alzas que se situaron, de promedio, en el 2% (en concreto, un 2,05% en el caso del Ibex 35).

Aún más significativas fueron las ganancias de rentabilidad en el mercado de renta fija (del 1,4% en el caso del bono español), impulsadas por la expectativa de que el BCE intensifique su adquisición de títulos de deuda pública. No obstante, los estímulos pueden ir más allá de ampliar el QE, ya que el propio Draghi abrió la puerta a rebajar de nuevo la tasa de facilidad de depósito, ahora situada en el 0,2% negativo, lo que implica penalizar más a los bancos que depositen su dinero en el BCE en lugar de hacerlo circular.

Por tanto, deja claro que sacará de nuevo la artillería para responder a un momento díficil a escala global. No en vano, el enfriamiento, y en algunos casos recesión, de las economías emergentes provocará que el PIB mundial apenas supere el 3% de avance en 2015. La eurozona se muestra especialmente vulnerable, debido a su bajo crecimiento y a su inflación bajo mínimos. Redoblar unos estímulos que ya muestran su efectividad, elevando el crédito bancario, es la respuesta que la Unión Monetaria necesita para resistir las incertidumbres.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky