El incremento de los salarios pactado por la patronal y los sindicatos el pasado año para subidas de hasta un 3% anual de aquí a 2020 parece estar teniendo su efecto en las nóminas de los trabajadores, si bien no de forma homogénea en todos los rincones del país. Así aparece recogido en el Informe Infoempleo Adecco: Oferta y demanda de empleo en España, donde se aprecia como Cataluña es la comunidad autónoma donde se perciben los salarios más altos de todo el país.
Concretamente, los empleados de las empresas catalanas cobran un sueldo medio de 26.421 euros, a lo que le siguen de cerca los trabajadores del País Vasco, con una remuneración media de 24.162 euros, Galicia con 23.846 euros, y la Comunidad de Madrid cerrando el top 4 con 23.506 euros anuales, un 12% menos que en Cataluña.
De hecho en esa franja de 22.000 euros a 24.000 euros (donde se encuentran también Madrid y Galicia) están encuadradas la mayoría de las autonomías en su clasificación salarial. Aquí están los extremeños (23.409 euros), andaluces (22.938 euros), valencianos (22.492 euros) y canarios (22.367 euros).

Justo un escalón por debajo de estos niveles se encuentra otro nutrido grupo de regiones, entre los 21.000 euros y los 22.000 euros. Es el caso de las comunidades autónomas de Baleares (21.912 euros), Navarra (21.893 euros), La Rioja (21.586 euros), Murcia (21.443 euros), Asturias (21.401 euros), Castilla la Mancha (21.339 euros) y Aragón (21.040 euros).
Y ya en un nivel inferior a los 21.000 euros se encuentran las regiones de Castilla-La Mancha y de Cantabria, con haberes anuales de 20.969 euros y 19.610 euros, esta última con un nivel de renta de un 34,7% menor que su extremo opuesto catalán.
Cabe recordar en este punto que el sindicato CCOO reclamó este mismo martes que continuasen los esfuerzos de la parte empresarial para aplicar el incremento salarial pactado hace un año y el alza del 22% del SMI, si bien el secretario general de la organización, Unai Sordo, reconoció que un 66% de los empleados asalariados de nuestro país ya han visto efectuado el incremento pactado entonces de un mínimo del 2%.
Premio a la antigüedad
Además, el informe de Adecco arroja otro de los aspectos que lastran el desempeño de la recaudación tributaria de la Seguridad Social por cotizaciones sociales: la devaluación salarial provocada por la crisis económica del 2008 asociada a una destrucción masiva de puestos de trabajo. En este sentido si bien hace una semana conocíamos el mejor dato de afiliación a la Seguridad Social de la historia con 19,517 millones de cotizantes, estos mismos anotarán en términos de ingresos al Sistema un déficit de 18.000 millones de euros, cuando en 2007 –cifra más cercana- se registraba superávit en la Tesorería para pagar las pensiones.
En este sentido, el estudio refleja como el 42% de las empresas consultadas reconoce estar pagando un salario menor a las nuevas incorporaciones con puestos similares a trabajadores ya en plantilla. Concretamente, el 25,8% de las organizaciones ofrece una remuneración hasta un 15% inferior a aquellos trabajadores que llevan menos de cinco años en la empresa, mientras que el 14,1% retribuye entre un 15% y un 30%, el 0,71% entre un 30% y un 50% menos y el 1,41% hasta un 50% por debajo.

Relevante sobre este aspecto es que ante la pregunta a medio y largo de plazo de la evolución de las pagas a los trabajadores, el 66% asegura que para el 2025 se habrán recuperado los niveles salariales perdidos durante la crisis económica, y hasta un 34% de ellos no cree en haber revertido aún para entonces la devaluación salarial gestada tras la crisis.
Con todo ello, si se tiene en cuenta la antigüedad del empleado, ante un mismo puesto se encuentran diferencias de hasta el 21% de remuneración. Así, el salario medio de una persona que lleva menos de un año en una empresa es de 20.151 euros brutos al año, mientras que el de otra cuya antigüedad es es superior a 10 años es de 29.083 euros para el mismo puesto.
No en vano, Asempleo apuntó en un estudio esta misma semana que la Encuesta de Población Activa (EPA) que publicará el INE en los próximos días será la peor desde el año 2016 en términos de creación de empleo, reflejando el impacto definitivo de la desaceleración de la economía y del crecimiento del PIB que este año avanzará cerca de 0,6 puntos porcentuales menos que el pasado 2018.