Steven Mnuchin, secretario del Tesoro de EEUU, asegura que el acuerdo comercial con China está listo al 90%. En declaraciones a la CNBC, se ha mostrado optimista y ha asegurado que el camino para llegar a un acuerdo está listo. Donald Trump se reunirá con el presidente chino Xi Jinping en el G-20 de Osaka, donde los encuentros más relevantes tendrán lugar este viernes y sábado. Ambos mandatarios esperan cerrar un acuerdo que podría poner fin a una batalla comercial que está en el foco de inversores y expertos, que ven como un endurecimiento de los aranceles podría hacer descarrilar la economía global. No obstante, tras las alentadoras palabras de Mnuchin ha saltado a la palestra Trump para amenazar con más aranceles si China no cede.
Tras estas declaraciones del secretario del Tesoro, las bolsas europeas, el petróleo y otros activos de riesgo reaccionaron al alza. No obstante, el Ibex 35 ha terminado la sesión prácticamente plano tras haber llegado a subir más de medio punto pordcentual. Títulos muy dependientes del comercio internacional como ArcelorMittal también recuperaron parte del terreno perdido.
Y es que tras la zanahoria de Mnuchin, llegó el palo de Trump. El presidente de EEUU, Donald Trump, ha advertido antes de la próxima Cumbre del G20 de que impondrá aranceles adicionales sobre las importaciones procedentes de China si no se llega a un acuerdo comercial, advirtiendo de las repercusiones que la medida puede tener para el gigante asiático, incluida la deslocalización de empresas.
"Impondría aranceles adicionales, tasas adicionales muy sustanciales si no hay un trato", ha amenazado Trump durante una entrevista con la cadena estadounidense Fox News, donde ha expresado su disposición a gravar otros 350.000 millones de dólares (309.000 millones de euros) en productos de China además de los 250.000 millones de dólares (220.000 millones de euros) a los que se aplicó un arancel adicional del 25%.
Por su parte, unas horas antes Mnuchin había declarado que "se había hecho el 90% del camino y creo que hay una ruta para completar este acuerdo", ha reconocido el secretario del Tesoro de EEUU.
Con estas declaraciones Mnuchin reafirma el optimismo mostrado por la Cámara de Comercio de EEUU, que hace unos días aseguraron que el acuerdo con Pekín estaba cerca. Las negociaciones comerciales que mantienen desde hace meses China y Estados Unidos se acercan a su fase definitiva, después de que ambos países hayan resuelto la mayor parte de las disputas que impedían alcanzar un acuerdo. Myron Brilliant, vicepresidente ejecutivo de Asuntos Internacional de la Cámara de Comercio de EEUU, reconoció de que el 10% restante para alcanzar el acuerdo "es la parte más difícil".
En caso de que esta serie de encuentros fuera exitosa, despejaría el camino para que Donald Trump, presidente de EEUU, y Xi Jinping, presidente de China, formalicen un acuerdo poniendo fin a la incertidumbre que rodea a los mercados financieros y la economía global.
La tensión era muy alta
Hasta esta semana, la situación parecía complicarse entre ambos países. Pekín no quería hablar con Washington, mientras que Trump seguía insistiendo en que en esta guerra comercial China tiene todas las de perder. El mandatario estadounidense había amenazado con una nueva tanda de "aranceles adicionales" al 25% sobre importaciones chinas, por valor de 325.000 millones de dólares, "está en proceso".
Por su parte, Pekín había anunciado en mayo un aumento los aranceles desde el 5 hasta el 25% sobre algunos productos estadounidenses (unos 2.493 bienes) por valor de 60.000 millones de dólares el 1 de junio.
Esta escalada de tensión está entre las principales preocupaciones de los inversores y expertos, que ven con miedo cómo una guerra comercial total puede hundir el comercio internacional y el crecimiento de la economía global.
Respuesta a Irán
Por otro lado, Mnuchin ha contestado a las palabras del presidente iraní Hassan Rouhani que cuestionó recientemente la salud mental del presidente Donald Trump.
Mnuchin cree que el enfado de Irán es la prueba de que las nuevas sanciones impuestas al régimen de los ayatolás. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este lunes un decreto imponiendo nuevas sanciones que "golpearán duro" a Irán, según indicó el mandatario. Las represalias impedirán que el líder supremo iraní, el ayatolá Ali Khamenei, y otros individuos tengan acceso a instrumentos financieros.
"Eso debe significar que las sanciones están funcionando si ellos están enfadados es por eso. Eso es el reconocimiento de que están funcionando", ha recalcado Mnuchin.