
El proyecto de Presupuestos Generales del Estado, que ya fue criticado por el Banco de España este lunes, tampoco convence a la Autoridad Independiente de Responsabilidad Económica y Financiera (AIReF). El ente no se cree que se pueda cumplir ni el pronóstico de ingresos ni el de déficit, que prevé que se desvíe al 2,2 por ciento de PIB, es decir, 11.000 millones de euros más que lo previsto con el objetivo del 1,3 por ciento vigente para 2019.
Esta previsión es todavía más pesimista que la que hiciera el Banco de España, que era del 2 por ciento. Esto se debe a que los "ajustes de déficit planteados son imposibles de cumplir", indicó José Luis Escrivá, presidente del ente, durante su comparecencia de ayer en la Comisión de Presupuestos del Congreso de los Diputados. Apuntó además a que, aunque sí que es posible que entidades locales y comunidades autónomas puedan cumplir con sus respectivos objetivos de déficit, es ""improbable" y "muy improbable" que Administración Central y Seguridad Social lo logren, respectivamente.
De hecho, el caso de la Seguridad Social es paradigmático. El déficit estimado para este ámbito es de unos 18.650 millones, aproximadamente el 1,5 por ciento del PIB, cuando el objetivo es que el déficit se reduzca al 0,9 por ciento.
Ingresos irreales
Los ingresos tampoco se libran del suspenso de la AIReF. La Autoridad rebaja su perspectiva de crecimiento en casi dos puntos, del 9,5 por ciento al 7,6 por ciento. Escrivá indicó que esto se debe, principalmente, a la reducción del impacto de las nuevas medidas recaudatorias.
Con ellas el Gobierno aspiraba a lograr unos 5.654 millones. Sin embargo, el ente recorta casi la mitad de esta estimación y deja estos ingresos en 2.908 millones aproximadamente. La principal causa de esta reducción está en las tasas Tobin y Google. Los retrasos en su desarrollo provocan que la recaudación por estos nuevos tributos – que todavía tienen que superar la votación en las Cortes – caiga un 83 por ciento. Además, no espera ingresos añadidos por los cambios previstos en el Impuesto de Patrimonio, para gravar a las rentas más altas.
La AIReF también considera improbable que se cumpla la recaudación por IRPF, cuyo incremento rebaja una décima por medidas como la devolución del IRPF de las prestaciones de maternidad y paternidad.
Además, Escrivá informó de que el cambio en el sistema de recaudación del IVA, para que a lo largo de 2019 se ingresen 13 meses en vez de 12,– lo cual permitiría al Estado disponer de 2500 millones más – , tendrá efecto "neutro" en la Contabilidad Nacional, es decir, ninguno, y no computará a efectos de déficit. Pero además hay un riesgo añadido: cuanto más se tarden en aprobar unos nuevos Presupuestos, más se reducirá el impacto de las medidas recaudatorias. El efecto del retraso puede ser de 1.300 millones.
Gasto bien evaluado
En cambio, la AIReF considera que las medidas de gasto contempladas en los Presupuestos sí están bien evaluadas por parte del Ejecutivo, aunque el ente las valora en unos 120 millones más hasta llegar a los 5.250 millones.
En este sentido, Escrivá alertó ayer del escaso margen de maniobra con el que contará el Gobierno a la hora hacer nuevos ajustes con las Cuentas diseñadas por el Ejecutivo de Pedro Sánchez.
A pesar de las críticas en el aspecto fiscal, la AIReF avala las previsiones macroeconómicas del Gobierno, que rebajó al 2,2 por ciento el pronóstico de crecimiento de PIB para este año. Con todo, "los últimos datos apuntan a una mejoría de la desaceleración y de la economía". Concretamente, a cierre de 2018 y del mes de enero están siendo "positivos" y "mejores de lo que se esperaba", por lo que la AIReF se guarda bajo la manga una previsión "algo superior" para 2019, aunque no la desveló.