La tasa de inflación interanual en Alemania subió en noviembre un 2,3%, debido principalmente al encarecimiento de los productos energéticos, informó hoy la Oficina Federal de Estadística (Destatis).
Aún así, el índice de precios al consumo (IPC) registró un avance menor al de octubre, cuando se situó en el 2,5%. Respecto al mes anterior, el incremento del IPC en noviembre fue del 0,1%, agrega el comunicado de Destatis, que confirma los datos provisionales difundidos el pasado día 29.
Los precios de la energía, que desde marzo crecen de manera continua, subieron en noviembre un 9,3% interanual, después de un aumento del 8,9% en octubre. Respecto a noviembre del año pasado, se encarecieron sobre todo el gasóleo ligero -un 40,7%- y los carburantes -un 15%-.
Por contraste al fuerte aumento de los precios de los derivados el petróleo, los de otros productos energéticos se desarrollaron de forma notablemente más moderada. Así, las tarifas para la calefacción central y urbana crecieron un 3,7%, y la electricidad, un 1%, mientras que el gas se abarató un 1,4%.
Sin tener en cuenta el impacto de la energía, la tasa de inflación se habría situado en noviembre en el 1,4%, al igual que si se excluyen los derivados del petróleo. Los alimentos se encarecieron un 1,4% entre noviembre de 2017 y 2018, lo que supone un aumento menor al 1,9% de octubre y al 2,8% de septiembre y tuvo un efecto amortiguador sobre la tasa general de inflación.
En el plazo de un año se abarató notablemente la fruta -un 4,2%-, mientras que la verdura se encareció con un 9,8% considerablemente. Los consumidores tuvieron que pagar asimismo algo más por otros grupos de alimentos como el pescado y sus derivados -un 2,5%-, el pan y los cereales -un 1,9%- y los productos lácteos y huevos -un 0,5%-.
Los precios para otros bienes se encarecieron un 3,2% interanual, influenciados en gran medida por el mayor coste de la energía. Subieron notablemente los precios de la cerveza (5,9%), de periódicos y revistas (4,6%) y del tabaco (3,1%.)
Por contra, se abarataron la electrónica de consumo y los teléfonos, un 5,1% y un 3,3%, respectivamente. En el sector servicios, los precios subieron con un 1,5% interanual en menor medida que los de otros bienes y tuvieron por lo tanto un efecto amortiguador sobre la inflación.
Decisivo para el encarecimiento en los servicios fue el aumento de los alquileres de viviendas en un 1,5 %, al constituir uno de los principales gastos del consumidor privado.
Algo más se incrementaron las tarifas para el mantenimiento y reparación de vehículos -un 2,5%-, así como las de cáterin en restaurantes, cafés y venta ambulante -un 2,1%-.
Significativamente más baratos resultaron los servicios educativos de infantil y primaria -un 11,9%-, sobre todo por la supresión de los costes de parvulario en algunos estados federados, y también se abarataron un 0,7% los servicios de telecomunicaciones.
El IPC armonizado para Alemania, el que se calcula con criterios comunitarios, se elevó en noviembre un 2,2% en términos interanuales y un 0,1% respecto al mes anterior.