Después de que el pasado fin de semana se confirmara que el real decreto que subirá el salario mínimo interprofesional (SMI) a 900 euros en 2019 se aprobará en el Consejo de Ministros del 21 de diciembre -justo el que se celebrará en Barcelona-, el Gobierno no descarta encadenar otra subida para 2020 que lleve estos sueldos hasta los 1.000 euros.
Así lo indicó María Jesús Montero, ministra de Hacienda, quien afirmó que el pacto de la Mesa Social -órgano que reúne a la Administración Pública, a sindicatos y a patronales- para que por la vía del convenio colectivo el SMI se suba a 1.000 euros en 2020 es "una reivindicación que permanece intacta".
Montero abordó esta cuestión tras ser cuestionada por el recién anunciado aumento del SMI a 1.500 euros en Francia. "Es obvio que cuando se propuso la subida del SMI a 900 euros al mes en España no se estaba proponiendo algo que estuviera fuera de la realidad ni que no estuviera en consonancia con los países de nuestro entorno. Ha habido muchos agoreros que vaticinan que el SMI podría plantear una destrucción de empleo, pero todo lo contrario: desde nuestro punto de vista puede servir de estímulo económico para el consumo". Así mismo, consideró que en caso galo "no he visto que los organismos internacionales ni nadie se haya llevado las manos a la cabeza. Todo lo contrario".
Hoja de ruta de los PGE
Sobre la tramitación de los Presupuestos, aseguró que se va a seguir la hoja de ruta establecida y darlos a conocer en enero. Describió como "trámite" la presentación de los objetivos de estabilidad del Gobierno y consideró que este proceso no retrasará una eventual aprobación -o rechazo- de las Cuentas.
La ministra confirmó que el Gobierno presentará el proyecto de Presupuestos Generales para 2019 con la senda de estabilidad presupuestaria del Gobierno de Mariano Rajoy, que contempla un déficit del 1,3% en 2019, si bien prevé actualizar los objetivos a lo largo del próximo año una vez se apruebe la reforma de la Ley de Estabilidad que elimina el veto del Senado, que "boicotea" la senda del Ejecutivo.
"Los ritmos del Gobierno está claro que no se acompañan por parte del Congreso y por tanto nos vemos obligados a construir los Presupuestos con la senda anterior y cuando se apruebe la nueva senda tendremos que adaptar alguna cifra", señaló Montero.
Montero ha confirmado que, dado que el Congreso rechazará nuevamente la senda del Gobierno, el Ejecutivo presentará los Presupuestos con la senda de estabilidad presupuestaria propuesta por el Gobierno de Mariano Rajoy y aprobada por el Congreso, que contempla un déficit del 1,3% en 2019, tres décimas en 2020 y superávit en 2021.
Una vez que se apruebe la reforma de la Ley de Estabilidad Presupuestaria, el Gobierno actualizará los objetivos: la senda del Gobierno de Pedro Sánchez relaja los objetivos de déficit hasta el 1,8% del PIB en 2019, al 1,1% en 2020 y al 0,4% en 2021.
Chalecos amarillos
Por otro lado, la ministra de Hacienda, quien esta mañana presidió la apertura de un acto sobre los 40 años de la Constitución, descartó que la subida del diésel en España pudiera dar fruto a unos 'chalecos amarillos' a la española. Montero argumentó que el incremento de los combustibles en Francia era generalizado, y esa es la razón que ha causado el desapego social. En este sentido, recordó que el plan español es una equiparación fiscal del gasóleo y que no afectará a los transportistas.
Respecto la situación en Cataluña, Montero recordó que la Hacienda pública mantiene un "control reforzado" de las cuentas de la Generalitat y aseguró que se mantienen los planes de celebrar "con normalidad" el Consejo de Ministros del día 21.