
El gobernador del Banco de España (BdE), Luis María Linde, ha recordado este viernes que su mandato en el Banco de España finaliza el próximo 8 de junio, tras seis años de mandato, y ha recordado que según la ley del organismo supervisor, su prolongación es "del todo imposible".
"Mi mandato termina el 8 de junio y ninguna prolongación es posible, de ningún modo, según la Ley de Autonomía del Banco de España", ha firmado Linde durante su participación en un desayuno informativo organizado por El Independiente y patrocinado por Accenture. Linde ha subrayado que la Ley de Autonomía del organismo supervisor está "muy bien hecha", por lo que la postergación de su mandato es "imposible".
"Desligarlo" de la situación política
El gobernador del Banco de España ha subrayado también la necesidad de "desligar" la situación política del "importante" nombramiento del futuro gobernador, al tiempo que ha confiado en que Gobierno y PSOE actuarán en consecuencia. Linde ha insistido en que el Banco de España "no es una institución como las demás" porque el gobernador se sienta en el consejo de gobierno del Banco Central Europea (BCE), que es una de las principales instituciones europeas.
Asimismo, Linde ha recordado que el Banco de España "está obligado a dar opinión al Gobierno sobre materias económicas generales", como cuestiones de supervisión, fiscalidad o materia de trabajo.
Esta función está recogida en su ley de autonomía, por lo que "nadie le puede decir que no debe opinar". Linde ha recordado que su mandato termina el próximo 8 de junio y que de acuerdo a la ley de autonomía "ninguna prolongación es posible, de ningún modo".
El ministro de Economía, Industria y Competitividad, Román Escolano, explicó esta semana que el Gobierno cumplirá "escrupulosamente" los plazos para nombrar al sustituto de Linde, por lo que el propio Escolano anunciará la propuesta del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, sobre el nuevo gobernador del organismo supervisor en una Comisión de Economía de la Cámara Baja, que se celebrará la próxima semana o la siguiente.
Con posterioridad a que el ministro anuncie el nombre del nuevo gobernador en el Congreso, el nombramiento se validará en el Consejo de Ministros del 1 de junio o a más tardar del 8 de junio.
Hay que poner freno a la deuda
Al abordar la realidad económica del país, el todavía gobernador del BdE ha destacado la necesidad de frenar el incremento de la deuda en relación al PIB, porque un nivel tan alto como el que tiene España en estos momentos, cercano al 100%, "tiene muchas consecuencias negativas" a nivel macroeconómico.
Asimismo, ha eludido pronunciarse sobre el acuerdo de subida de pensiones recogido en los presupuestos, pero ha subrayado la necesidad de exigir "que cada vez que alguien defiende una subida de pensiones hay que explicar cómo se financia"y que que la sostenibilidad del sistema "hay que enfrentarlo, no con palabras, no con demagogia, sino de forma racional".
España tiene un "problema demográfico muy grave", ha reiterado, que no se puede resolver a corto plazo, por lo que la sostenibilidad del sistema de pensiones depende de mantener en equilibrio la "ecuación" de ingresos y gastos.
Linde ha considerado que la eventual puesta en marcha de un impuesto a la banca como han propuesto algunos grupos políticos "no es una solución" para financiar las pensiones, ya que produciría problemas y distorsiones con otros sistemas bancarios.
Otro reto económico al que se ha referido es la reducción de los "inaceptables" niveles de desempleo y su efecto en la desigualdad, una cuestión que el Banco de España ha abordado en un estudio que publicará la próxima semana.
El gobernador ha avanzado que una de las conclusiones del estudio es que "si no se resuelve el problema del desempleo en España, no se va a resolver el de la desigualdad".
En su opinión, la reforma laboral tuvo efectos positivos, pero persiste la segmentación del mercado y la temporalidad. En materia salarial, ha insistido en que las eventuales subidas deben analizarse en función de las empresas y los sectores para evitar "volver a las andadas" de garantizar aumentos salariales sin tener en cuenta las circunstancias económica.
No hay 'neo-burbuja'
Ha defendido que la economía española "tiene solución" pero que "hay que ayudarla", al tiempo que ha destacado los efectos positivos del "boom exportador" que vive el país.
Asimismo, ha pacificado los ánimos de los que ven gestarse una nueva crisis, al afirmar que no ve síntomas de una 'burbuja' inmobiliaria, ya que los actuales niveles de crédito para la adquisición de vivienda se encuentran alejados de una situación de esas características.
Eso sí, respecto al sector financiero, ha admitido que "estamos lejos de haber resuelto del todo el problema de los activos dudosos; la banca cumple la ratios de solvencia pero aún no estamos en el nivel que deberíamos estar", además de que "aún hay margen para más consolidación", para lo que confía en la aplicación completa de la regulación de Basilea.
Linde ha evitado pronunciarse sobre el retraso de la privatización de Bankia.