
El Reino Unido seguirá pagando por el brexit por lo menos hasta el año 2064, de acuerdo con proyecciones oficiales que estiman la cuenta total por abandonar la Unión Europea en 37.100 millones de libras esterlinas (41.400 millones de euros).
Es posible que el impacto total del brexit en la economía británica no se conozca nunca, según muestra el informe publicado este martes por la Oficina de Responsabilidad Presupuestaria (OBR, por sus siglas en inglés) del Reino Unido, pero es probable que el crecimiento del comercio se desacelere, mientras que la inversión empresarial siga frenándose como ya ha empezado a ocurrir, según señala la agencia Bloomberg. Todo ello influirá por diferentes vías a la economía británica pero cuantificarlo de forma exacta no está al alcance de la economía.
Un área donde los números son más claros es en el acuerdo para que Reino Unido pague a la UE una "la factura del divorcio" cuando abandone el bloque. Según los cálculos de la OBR, esta será de 41.400 millones de euros, lo que coincide con las estimaciones previas del gobierno.

Si bien la mayoría del coste (alrededor del 75%) estará pagado para 2022, la sangría podría continuar durante muchas décadas más por los pagos a la UE productos de ciertos pasivos a más largo plazo, como las pensiones de los funcionarios. El Reino Unido podría estar desembolsando dinero por el divorcio hasta la década de 2060, según el informe.
El Reino Unido tiene un plan para retrasar los pagos del acuerdo de salida con el fin de obligar a la UE a cumplir sus promesas sobre el acuerdo comercial final que nazca de esta ruptura.
"Dada la incertidumbre actual sobre cómo responderá el gobierno a las elecciones y compensaciones a las que se enfrenta durante las negociaciones, todavía no tenemos una base importante para predecir un resultado preciso sobre el que condicionar nuestra proyección", señalan desde la OBR. "Además, incluso si el resultado de las negociaciones fuera predecible, su impacto en la economía, la política monetaria y las finanzas públicas aún sería incierto".
Las expectativas de la OBR incluyen
-La negociación del Reino Unido por los nuevos términos comerciales con la UE y otros países "reducirá el ritmo del crecimiento de las importaciones y las exportaciones" durante un período de 10 años.
-El Reino Unido adoptará un régimen de migración más estricto después del brexit, pero no logrará cumplir con su objetivo de reducir la inmigración en "decenas de miles" de personas por año.
-El crecimiento de la inversión seguirá siendo "moderado" de cara a la incertidumbre relacionada con el brexit, "a pesar de las actuales condiciones favorables a la inversión generadas por los costes de endeudamiento históricamente bajos".
-A medida que se clarifica el régimen de comercio posterior al brexit, es probable que se produzca un ligero aumento del crecimiento del PIB.
Junto con las proyecciones de la OBR, el gobierno asignó 1.500 millones de libras para ayudar a los ministerios de cara a prepararse para el brexit. El Ministerio del Interior, que supervisa la seguridad fronteriza y la política de inmigración, recibió la mayor cantidad; seguido por el Departamento de Medio Ambiente, que se encargará de ejecutar los esquemas de subsidios agrícolas, y la agencia tributaria aduanera.