
El empleo en el sector primario, agricultura, silvicultura y pesca, está perdiendo peso en el total del empleo que se genera en Europa. El caso de España no es diferente, tras situarse en el 4% del total de los puestos de trabajo en 2016, según un documento elaborado por el Instituto de Estudios Económicos (IEE) en base a datos de Eurostat.
En el caso concreto de España, en 2016 había 760.000 personas trabajando en el campo o el mar (en 1998 había casi 1,1 millones de personas en este sector). De toda esa cantidad, sólo Andalucía acumula 244.200 personas, siendo la comunidad con mayor empleo en términos absolutos en este sector.
A Andalucía le siguen Galicia con 70.000 empleados en el sector primaria, Castila y León con 67.000 y la Comunidad Valenciana con 53.000 personas. Las comunidades con menos peso en términos absolutos on Madrid con 6.600 personas, Cantabria con 7.200 personas y La Rioja con 7.900 empleados.
España no es el único país en el que este sector está perdiendo terreno en lo que a creación de empleo se refiere. El IEE ha asegurado que el promedio del empleo total creado en el sector primario en la Unión Europea ha pasado de estar en el 7,8% en el 2000 al 4,5% del año pasado.
Un vistazo a Europa
Entre los países en los que se mantiene todavía una elevada proporción de empleo en este sector destacan Rumanía (24%), Bulgaria (18%) y Grecia (11,3%). Por detrás, le siguen Portugal y Polonia, donde el empleo creado en el sector primario se sitúa en el entorno del 10%.
Por encima del promedio de la Unión Europea, también se encuentran Eslovenia (7,7%), Letonia y Croacia (7,5%), Hungría (5,9%) e Irlanda (5,5%). Por debajo, en línea con el porcentaje registrado en España, se encuentran Austria (4%) y Finlandia (4,1%).