
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ha publicado un extenso trabajo sobre el envejecimiento de la población en los países avanzados y el devenir de los futuros pensionistas. La OCDE asegura que los cambios en el mercado laboral están incrementando el riesgo de que la desigualdad se incremente entre los futuros jubilados: "La experiencia de la vejez va a cambiar drásticamente para las generaciones más jóvenes". | Báñez asegura que los pensionistas han sido el colectivo "mejor tratado" en España desde 2011
Las nuevas generaciones están viviendo en un mundo muy diferente al que han vivido generaciones previas. "Los baby boomers (aquellos nacidos después de la II Guerra Mundial hasta finales de los 60 en el caso de España) se han beneficiado de un periodo de crecimiento económico sostenido, mejoras en salud, empleo y avances sociales".
Por el contrario, la conocida como Generación X (ahora tienen entre 35 y 50 años) "pueden asumir que no van a ser más ricos que sus padres en la vejez. La Generación Millennial, que ha alcanzado la edad adulta después del año 2000, han sido castigados por la Gran Recesión y sus consecuencias, reduciendo sus posibilidades para lograr una carrera estable".
Por si esto fuera poco, la digitalización y automatización están avanzando rápidamente y conquistando los procesos productivos de medio mundo. Estos avances están permitiendo que mejoras en el nivel de vida y en las rentas que generan a nivel agregado, pero su reparto está siendo un tanto desigual. Además, dicho cambios "están transformando de forma profunda el mundo laboral, poniendo en riesgo muchos trabajos y obligando al capital humano a adaptar sus habilidades rápidamente en un entorno cambiante".
Adiós a un trabajo para toda la vida
La OCDE subraya en su informe que "para muchos, lo de un 'trabajo de por vida' ya no es un escenario realista. El aumento de ingresos que han visto pasadas generaciones se ha reducido o incluso se ha estancado en muchos países. Mientras que la esperanza de vida continúa subiendo".
Ante este contexto de incertidumbre laboral y un incremento del gasto en pensiones y sanidad, "la futura población de mayor edad experimentará una vejez diferente en varios sentidos. La mayoría de la gente vivirá más, pero algunos habrán acumulado periodos de inactividad y de ingresos bajos", señala el informe.
Las crecientes disparidades en las condiciones del mercado laboral desembocarán en mayores ratios de pobreza entre los futuros pensionistas: "La sostenida y amplia mejor en el nivel de vida de los ancianos que se ha presenciado en las décadas pasadas, podría no continuar en el futuro".
En las notas adicionales sobre España, la OCDE alerta del rápido envejecimiento de la población. "España será el segundo país más envejecido de la OCDE para 2050, sólo por detrás de Japón".
Además, el envejecimiento tendrá consecuencias en diferentes áreas, como puede ser la sostenibilidad de las pensiones, las necesidades de atención y cuidado, especialmente para las personas mayor de 80 años, o incluso se podían producir situación de escasez de mano de obra.
También destaca los jóvenes españoles están encontrando serías dificultades para encontrar en el trabajo un punto de apoyo en sus vidas. En la actualidad lograr una carrera profesional estable y "un salario adecuado" se ha convertido en una quimera, sobre todo para los jóvenes con menores niveles de formación, "que tienen un alto riesgo de que estos efectos dejen cicatrices duraderas", según destacan el documento de la OCDE.
Ante este complejo contexto, la OCDE urge a los políticos a tomar decisiones de forma urgente dirigidas a mejorar el mercado laboral y la sostenibilidad de las pensiones. "La tasa de empleo para los adultos de mayor edad han caído con fuerza en España... mientras que para los jóvenes se debería suavizar la transición desde la etapa formativa a la laborar... es clave para España mantener el impulso de las reformas para mejorar la recuperación económica y estimular el crecimiento inclusivo", según sentencia la nota sobre España.