Le pese a quien le pese, el multimillonario empresario Donald Trump se postula como el candidato republicano mejor posicionado de cara a la marea de caucuses y primarias que se celebrarán el próximo martes 1 de marzo. Su multitudinaria victoria en Nevada, donde consiguió el 45,91% de los votos frente al 23,85% del senador de Florida, Marco Rubio, o el 21,38% del senador de Texas, Ted Cruz, erigen al polémico aspirante a la nominación republicana como el disruptor político por excelencia.
Con tres victorias en el bolsillo, a la del pasado marte habría que sumar las de Carolina del Sur y Nuevo Hampshire, Trump se dispone ahora a conquistar a la docena estados que celebrarán comicios el próximo "Supermartes", a los que seguirán otras primarias hasta el mes de abril. "Van a ser dos meses sensacionales", estimó el candidato republicano en su discurso desde Las Vegas tras su triunfo en Nevada. "Quizás no tengamos ni que esperar dos meses", señaló.
Para hacerse garantizarse la nominación republicana, Trump deberá conseguir 1.237 delegados de los 2.340. De momento, el empresario sólo cuenta con 81 pero sin embargo Cruz y Rubio, sus principales contrincantes, sólo cuentan con 17 cada uno.
Durante la jornada del martes 1 de marzo estarán en juego un total de 595 delegados republicanos, alrededor del 25% necesario para asegurarse la nominación del partido. Tras la intensa jornada de la semana que viene, el 15 de marzo es la siguiente fecha clave con la atención puesta en Florida, Illinois, Carolina del Norte y Missouri. Nueva York celebrará sus primarias el 19 de abril y la recta final llegará el 7 de junio, con California, Montana, Nueva Jersey, Nuevo México y Dakota del Sur.
