
La agencia de calificación Standard & Poor's (S&P) ha elevado un escalón el rating de emisor a largo plazo de Grecia, desde 'CCC+' a 'B-' pasando de calidad "muy pobre" a calidad "pobre" con perspectiva estable.
S&P expone en un informe que esta subida de la calificación responde a que desde el pasado verano el Gobierno griego ha acometido una "recapitalización" de sus bancos sistémicos y ha puesto en marcha las medidas de consolidación presupuestaria demandadas.
La agencia de calificación también ha indicado que espera que a finales del próximo mes de marzo el Gobierno se "comprometa" a implantar la reforma de pensiones, una de las condiciones impuestas por los acreedores internacionales para realizar la primera revisión del rescate a Grecia.
Además, la agencia reconoce que el país heleno ha demostrado que su economía es "más resistente de lo que esperaban" a pesar de los "múltiples problemas a los que se ha enfrentado" haciendo referencia a las dos elecciones generales, el referéndum y la imposición de un control de capitales a los que se ha enfrentado recientemente.
Recuperación robusta
De cara a este año, S&P ha afirmado que espera que la economía helena muestre una recuperación "más robusta", aunque ha advertido de la existencia de algunos obstáculos, como el hecho de que durante este año las instituciones financieras griegas "continuarán centradas en mejorar sus balances" en lugar de aumentar sus préstamos al sector privado.
Además, la agencia ha recordado que en el marco del rescate, el Gobierno griego se ha comprometido a disminuir sus gastos durante el año, un "reto" para la economía helena debido al "estado precario de la seguridad social y sistema educativo después de siete años consecutivos de recortes".
Por otro lado, S&P ha destacado algunos "posibles efectos positivos" que podrían contribuir a una recuperación más fuerte de lo esperado durante el año, como la caída del precio del petróleo, que respaldará el consumo, el aumento del turismo o el incremento de los salarios.
Riesgos "equilibrados"
Respecto a la perspectiva 'estable' que la agencia ha otorgado a Grecia, S&P ha destacado que prevé que durante los próximos doce meses los riesgos para su economía serán "equilibrados".
En este sentido, la agencia ha indicado que consideraría elevar su 'rating' si se cumpliesen determinados requisitos como una mejora más fuerte de la economía helena, el levantamiento del control de capitales, incluido el límite de retirada de depósitos, o si se disminuye el nivel de endeudamiento, entre otros.
Por otro lado, S&P ha advertido de que Grecia podría ver rebajado su 'rating' si el nuevo Ejecutivo no consiguiese ejecutar las